La capital de China se ahogaba el lunes con arena y polvo, cuando la tormenta de arena más grande en casi una década azotó la ciudad y transformó el cielo en un misterioso tono naranja.
Fotos de Beijing, hogar de 21,7 millones de residentes, muestran rascacielos y automóviles envueltos en una espesa neblina. Los índices de calidad del aire registran una calificación de “peligrosos” y las autoridades aconsejan a los residentes que permanezcan adentro.
Sin embargo, muchos trabajadores desafiaron las condiciones climáticas y caminaron o montaron bicicleta a través de los fuertes vientos arenosos. La visibilidad era tan mala en algunas partes de la ciudad que los conductores tuvieron que encender las luces, aunque era mediodía.
“En algunos lugares, hay fuertes tormentas de arena con una visibilidad de menos de 500 metros”, dijo el lunes la Administración Meteorológica de China, en un comunicado. “Este también es el clima de polvo y arena más fuerte que ha afectado a China en casi 10 años”.
La calidad del aire en Beijing ya era mala debido a los altos niveles de contaminación. Cuando golpeó la tormenta de arena, la calidad del aire de la ciudad se desplomó a niveles peligrosos, según el Índice Mundial de Calidad del Aire.
Fuente: CNN
No es una película del fin del mundo, es la ciudad de Beijing, China???????? cubierta por la más grande tormenta de arena que se ha registrado en 10 años, proveniente del desierto de Gobi, que junto con la gran contaminación formó estas escenas apocalípticas. pic.twitter.com/bBvTrXrygF
— Arturo Luna Silva (@ALunaSilva) March 15, 2021