ESPN informa que el mundo Nacional está convulsionado. La movida de los hinchas tricolores para el posible retorno de Luis Suárez llegó a límites insospechados y Luis Suárez aceptó el desafío de volver a vestir la blanca.

Por estas horas, en la cabeza de los dirigentes, deben estar rondando los pequeños detalles.

¿Dónde será conveniente realizar el primer entrenamiento? Los hinchas pueden llegar a colapsar Los Céspedes y sus alrededores. Todos quieren verlo. Así que no sería nada descabellado pensar que, como ocurre cuando los parciales arman banderazos, lo lleven al Parque Central.

La camiseta es otro tema. El dueño de la número 9 es el argentino Emmanuel Gigliotti. Pero Luis está identificado con la 9. Y ahí se genera todo un tema de merchandising y comercialización. No sería de extrañar que se hable con Gigliotti para que le preste la 9 a Suárez.

La fijación de la cancha es otro escenario que se plantea con la llegada del salteño. Está claro que Nacional oficia como local en el Parque Central, pero la presencia de Suárez puede determinar una mayor concurrencia que redundaría en ingresos económicos por venta de entradas.

Por estas horas los tricolores esperan ilusionados a Luis. ESPN analiza qué gana y a qué se expone el máximo goleador de la historia de la Selección uruguaya en Nacional.

LOS MOTIVOS QUE TUVO LUIS PARA DECIR SÍ

Entre los muchos motivos que tuvo Luis Suárez para aceptar la propuesta de volver a Nacional se encuentra el mandato del corazón y el hecho de tener continuidad en un equipo que le permita llegar con rodaje a la Copa del Mundo de Qatar 2022.

El presidente de Nacional, José Fuentes, reveló que la movida que generaron los hinchas del club le tocó el corazón a la familia Suárez. Y allí hay detalles que juegan a favor del posible retorno. Por ejemplo, que sus hijos lo puedan ver con la camiseta del cuadro del que son hinchas. Es más, su hijo grande podría jugar en el baby de Nacional mientras su padre entrena ya que la cancha de los chiquitos queda pegada a la de Los Céspedes.

Otra ventaja que tuvo para Suárez decirle sí a Nacional, es que podrá tener actividad y llegar con rodaje al Mundial de Qatar, que en definitiva es lo que busca. Un club donde se asegura que va a jugar todos los fines de semana.

Luis se tendrá que insertar en un equipo que pasa por un buen momento. Tiene viento en la camiseta. Está en la definición del Intermedio y bien perfilado para ganar la Tabla Anual.

No es menor el hecho de que llegue a un equipo donde no lo esperan como el salvador que tiene que cargar con todo el peso de un cuadro que no gana.

Asimismo, Nacional le asegura la actividad internacional ya que los tricolores clasificaron a los cuartos de final de la CONMEBOL Sudamericana.

Otro detalle es que, el clásico del Torneo Clausura, se jugará en el Parque Central.

Y finalmente, a favor de Luis, cuenta el respaldo de la gente. Los hinchas de Nacional le movieron el piso al salteño.

LOS MOTIVOS QUE TENÍA LUIS PARA DECIR NO

Hace un tiempo el excapitán de la Selección uruguaya, Diego Lugano, explicó los motivos por los cuales jamás volvió al fútbol uruguayo. El principal argumento radica en el hecho de que la gente lo identificaba como jugador de Selección. Lugano entendía que, volver a uno de los equipos grandes de Uruguay, era dividir las aguas y que quería justamente que la gente lo recuerde por su pasaje con la Celeste en el pecho.

Esto encierra otro detalle: el nivel de exigencia. Que nadie piense que a Suárez le van a aplaudir todo. El ejemplo más claro lo vivió Diego Forlán en Peñarol que estuvo un año y se fue corriendo.

En Europa tenía la posibilidad de defender a alguna institución que juegue la poderosa Champions League. De hecho, se habló de dos posibles interesados como Milan y Borussia Dortmund y ambos jugarán la Champions.

El salteño pasará de jugar en escenarios de primer mundo a canchas donde ni siquiera se puede ir al baño. Es una realidad.

El calendario le marca a Nacional que en el Torneo Clausura tendrá que jugar ocho partidos de visitante, dos de ellos en el interior del país.

El debut del 9 se produciría justamente en el interior. En la primera fecha del Clausura, Nacional jugará ante Deportivo Maldonado en el Campus Domingo Burgueño Miguel.

En la tercera jornada los tricolores tendrán que visitar la compleja cancha de Liverpool, ahí donde Suárez se tendrá que vestir en el diminuto camarín de Belvedere por el que pasó Diego Forlán en el año 2015 cuando defendió a Peñarol.

En la séptima fecha los albos viajarán a Colonia para jugar contra Plaza que está oficiando como local en el Prandi.

En la novena, River Plate recibirá a Nacional en el Saroldi y en la undécima le tocará visitar el Parque Capurro para enfrentar a Fénix.