Según la Encuesta Nacional de Seguridad Pública Urbana (ENSU) del Inegi, la percepción en materia de seguridad en la capital poblana mejoró 5.5 puntos porcentuales en marzo de 2023 respecto del trimestre anterior, sin embargo, la cantidad de poblanos que dijo presenciar algún robo o asalto ha sido la más alta de los 11 últimos trimestres.
En el primer trimestre de 2023, el 74 por ciento de presenció la comisión de robos y asaltos, cantidad que es 13 puntos porcentuales arriba de lo reportado al cierre del año anterior y, además, es el porcentaje más alto de los últimos 11 trimestres.
No obstante lo anterior, el estudio reportó en el primer tramo del 2023, el 70.4 por ciento de los habitantes perciben vivir en una ciudad insegura, contra el 75.9 que lo consideró en diciembre de 2022. Una mejoría que no se observa en la atestiguación de delitos y conductas antisociales, al menos en siete de ocho rubros.
Por ejemplo, en la primera entrega de la ENSU de este año, el 39.6 por ciento dijo haber atestiguado disparos frecuentes con armas de fuego, lo que representa un aumento del 7.8 puntos porcentuales.
Otros aumentos de atestiguamientos de conductas antisociales y delitos por habitantes de la ciudad poblana se dieron en el consumo de alcohol en las calles, bandas violentas o pandillerismo, venta o consumo de drogas, tomas irregulares de luz, robo o venta ilegal de gasolina.
Vale la pena precisar que los 74.4 por ciento que dijo ser testigo de robos o asaltos es la cantidad más alta reportada desde marzo de 2020, que la ENSU informó entonces 81.4 por ciento de testimonios en la ciudad de Puebla.