El Instituto de Ingeniería de la UNAM, informó que los monumentos históricos de Puebla son más vulnerables a los sismos que los del Distrito Federal debido a las películas ardidas geográficas de la capital del país.

En un comunicado difundido por Notimex, la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), indicó que el grupo de Monumentos Históricos del Instituto de Ingeniería (II) estudia el comportamiento sísmico de las estructuras antiguas en nuestro país.

Lo anterior, con el fin conocer sus vulnerabilidades y proponer técnicas de reforzamiento para su preservación. Se sabe que el daño más recurrente se da en las torres, pues casi siempre colapsan los campanarios y, en menor grado, las cúpulas.

Marcos Mauricio Chávez Cano, investigador del II, dijo que no hay edificaciones iguales, y cada una responde diferente ante un sismo debido a su geometría, elementos constitutivos y ubicación.

"Por ejemplo, debido a las peculiaridades geográficas capitalinas, la mayoría de los monumentos históricos son más resistentes a temblores que edificios aledaños. En Puebla esto no es así y los movimientos ocurridos en 1999, en Tehuacán, han evidenciado vulnerabilidad", expresó.

Explicó que en los templos coloniales, la deformación derivada del mortero de cal, grietas u oquedades, entre otros elementos, ayuda a disipar el impacto, y, aunado a las condiciones del Distrito Federal, los hace menos endebles ante la actividad sísmica. Mencionó que al darse movimientos de gran intensidad en la capital, algunos han sufrido percances, pero por falta de mantenimiento o hundimientos.

Mientras que en Puebla, por las singularidades de los estremecimientos terrestres registrados en el estado y por la arquitectura predominante de las iglesias (más altas que las oaxaqueñas), causan más estragos en las edificaciones. Con el conocimiento generado es factible proponer técnicas más eficientes para preservar el patrimonio de México.