El Economista informa que en más de 20 de los 217 municipios que tenían como actividades económicas principales la cantera, producción de café, sal, manzana y cebada, se ha reducido al 50% debido a la migración de habitantes a Estados Unidos y otras entidades.
Lo anterior fue propiciado también por los bajos precios y contratos con condiciones desiguales para los productores, quienes desde hace una década dejaron deber en sus respectivos rubros un beneficio monetario respecto a la inversión que hacen, comenta el economista de la Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla (Upaep), Marcos Gutiérrez Barrón.
Detalla que en Cuetzalan, uno de los principales productores de café, así como en siete localidades de la Sierra Norte, los campesinos están optando por salir a las grandes ciudades para trabajar en el sector de la construcción o servicios, mientras que quienes se quedan prefieren apostarle al turismo como guías.
Estima que los habitantes que trabajan como guías en la población ganan hasta 1,000 pesos en un fin de semana respecto a los 500 pesos semanales por trabajar en los cafetales como cortadores de la cereza.
Comenta que con esos bajos salarios, los habitantes principalmente jóvenes, prefieren migrar para encontrar mejores oportunidades, al igual como ocurre en Zapotitlán Sailnas, donde el número de parajes de sal, pasó de 33 a sólo 12, los cuales generan actualmente 80 empleos respecto a los 350 de hace 20 años.
Menciona que el kilogramo de sal es oferta en 10 pesos y que han buscado industrializarse para sacar hasta 10 veces más de su valor actual, sin embargo no existen apoyos para la tecnificación.
Innovación no estimula mercado
La presidenta de la Asociación Salytur, Sagrario Melo Pacheco, menciona que aun cuando han innovado en productos, ya que ahora los ofertan mezclados con hierbabuena, ajo, orégano, entre otras especias, los cuales oscilan entre 100 y 140 pesos, el sector restaurantero mantiene una baja demanda por el alto costo, en lugar de ello prefieren usar sal convencional.
Comenta que esa caída ha desalentado a los salineros, quienes prefieren que sus hijos emigren a las grandes urbes para trabajar o estudiar.
Por su parte, el también economista de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP), Eudoxio Morales, comenta que en ocho municipios del Valle de Oriental, principalmente San Salvador El Seco, se tiene el caso de que la producción de cantera y manzana cayó 40%, por la falta de apoyos y el intermediarismo.
Expone que en el caso de la fruta, las contingencias climatológicas han afectado al sector, ya que las empresas de jugos aprovechan la situación para pretender comprar la cosecha hasta 30% menos respecto a su costo original.
En el caso de la cantera, comenta que a los artesanos resulta complicado acceder a créditos para maquinaria, ya que no hay facilidades de pago o se prioriza otro tipo de industria, aun cuando hasta la década de los años 90 era la primera fuente de ingresos y que se combinaba con el cultivo de maíz.
Respecto a la cebada que se siembra en Cuyuaco, Libres y Oriental, dice que la industria cervecera está comprando la tonelada a 2,800 pesos, cuando el valor real es de 3,800, bajo el argumento de que hay “baja calidad” de los cultivos por plagas que han debilitado el grosor y textura de las varas.
