La eficiencia energética es un elemento que permitirá a una nación avanzar hacia el desarrollo sustentable, así lo expresa el Plan Nacional de Desarrollo, mismo que establece que para el año 2023 el 35 por ciento de la energía generada en el país deberá proceder de fuentes renovables.
Consciente de este cometido, la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla aprobó, a través del H. Consejo Universitario, la creación y puesta en marcha de la carrera de Ingeniería en Energías Renovables, adscrita a la Facultad de Ciencias de la Electrónica, donde se preparan profesionales capaces de enfrentar este reto. Al fusionar la ciencia con la ingeniería; la BUAP se convierte en la única institución de educación superior en el estado en tener una licenciatura con esta filosofía.
Además, en concordancia con el programa II Investigación y Posgrado, y el VII Universidad y Responsabilidad Social, del Plan de Desarrollo Institucional de la Institución, investigadores de diferentes unidades académicas realizan proyectos innovadores que se suman al mencionado objetivo nacional.
Científicos del Centro de Investigaciones en Dispositivos Semiconductores del Instituto de Ciencias (ICUAP) desarrollaron una celda termoeléctrica para radiación solar concentrada, que permitirá convertir de forma más eficiente el calor en energía. Cabe destacar que una sola celda termoeléctrica podría sustituir la función de un panel solar.
Debido a su viabilidad y aplicación tecnológica, dicha invención se encuentran en trámite para obtener la patente ante el Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial (IMPI), con el apoyo del Centro de Patentamiento del Centro Universitario de Vinculación y Transferencia de Tecnología (CUVyTT).
Un vehículo 100 por ciento ecológico
Por su parte, integrantes de la Facultad de Ciencias de la Electrónica desarrollaron el “Auto Insignia”, en una muestra de cómo a través de sinergias los universitarios han podido transformar un automóvil convencional en un vehículo ecológico a través del uso de energías renovables.
Se trata de un vehículo 100 por ciento ecológico, debido a que su motor obtiene la energía de un banco de baterías de 12 voltios conectadas en serie, que generan corriente directa de 48 voltios. Además, se instalaron celdas fotovoltáicas en uno de los estacionamientos de la Facultad para recargar las baterías, con la idea de no usar ni combustible, ni energía convencional.
El proyecto fue desarrollado por el Cuerpo Académico Sistema de Potencia para Tracción, Calidad y Generación de Energía, conformado por siete profesores e investigadores titulares, al que se sumaron un promedio de 20 colaboradores, estudiantes y ex alumnos.
Ingenio estudiantil
Actualmente la dependencia a los combustibles fósiles hace que la riqueza del mundo se rija en el país con más energía. No obstante, su precio está en aumento, son escasos y causantes de contaminación, por lo que han surgido diversas alternativas amigables con el medio ambiente, entre ellas el biodiesel, un combustible completamente orgánico que se obtiene a partir de lípidos de origen natural.
Para que las familias que posean automóvil puedan generar su propio combustible, Valentín Gálvez Salas y Víctor Manuel Juárez López, alumnos de la Facultad de Ingeniería Química, construyeron un equipo capaz de producir biocombustible en condiciones caseras.
El proyecto pretende obtener biodiesel a partir de aceite residual de rosticerías, cuya viabilidad es mayor debido a su bajo costo y fácil obtención que presenta frente a otros aceites base, como el vegetal o de cocina. Otra de sus ventajas es que no requiere extracción ni purificación.
Mientras Liliana Ortiz Moreno, estudiante de Maestría de la Facultad de Ingeniería Química, investiga cómo producir bioetanol con tecnología limpia por medio de los desechos de la semilla de ricino, la cual se usa para producir biodiesel, proceso donde al prensarla se desecha cerca del 70 por ciento.
Bajo esta misma línea de aprovechar los residuos orgánicos, Luis Alberto Juárez Moran, estudiante de doctorado en Física en la Facultad de Ciencias Físico Matemáticas, investiga la obtención de biodiesel a partir del aceite de remanentes de tres tipos de aguacate mexicano: criollo, hass y fuerte. Por el momento, el alumno analiza cómo obtener este biocombustible a través de la pulpa, ya sea por la extracción del aceite y por centrifugación, por lo que realiza las mediciones pertinentes y la comparación de aceites.
Vehículo solar
La Facultad de Ciencias Físico Matemáticas (FCFM) presentó un prototipo de vehículo solar, el cual funciona con paneles solares; así aprovecha energías alternativas y cuida el medio ambiente.
El prototipo es denominado Vehículo Universitario Solar (VUS), el cual fue desarrollado con recursos propios de la Facultad y funciona completamente con energía solar para mover al motor eléctrico. Tendrá una velocidad máxima de 30 kilómetros por hora, aunque puede alcanzar de 60 a 70 kilómetros en este tiempo, y puede llevar a tres personas.
Otra característica es su funcionamiento con energía mecánica, además de la solar, ya que dispone de pedales para generar movimiento, acción que promueve el ejercicio y sirve como un mecanismo de reserva en caso de terminarse la energía solar.
Acciones contundentes
Incluso como muestra de su compromiso por un mejor aprovechamiento de los recursos, la Máxima Casa de Estudios en la entidad puso en marcha un Sistema de Energía Eólica y Solar en el edificio de Rectoría en Ciudad Universitaria.
El edificio de Rectoría es la quinta dependencia universitaria donde se han instalado este tipo de sistemas –además de la Secretaría Administrativa de la Institución, así como en el Laboratorio de Ciencias Aplicadas, el Centro de Estudios en Energía y Ambiente y la dirección y oficinas administrativas de la FCFM-, los que en su conjunto evitarán la emisión de aproximadamente 10 toneladas de dióxido de carbono a la atmósfera cada año, una contribución universitaria sólida y palpable para cuidar el ambiente y por tanto preservar la vida en el planeta.
Estas son algunas acciones que emprende la BUAP para cumplir con su misión, en este caso generar conocimiento e investigación para el uso de energías alternativas que contribuyan al desarrollo de un país sustentable.