La corresponsabilidad entre gobiernos, sector privado y sociedad civil, junto con la integración de sustento científico en las políticas públicas de cuidado al medio ambiente, son fundamentales en la estrategia para combatir el cambio climático, coincidieron el gobernador Rafael Moreno Valle, el director general para Temas Globales de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), Roberto Dondisch Glowinski, y María Amparo Martínez Arroyo, directora general del Instituto Nacional de Ecología y Cambio Climático, al inaugurar la Décimo Cuarta Reunión del Diálogo de Cartagena para la Acción Progresiva, que se realiza en esta capital.
“Por ello mi gobierno, consciente de los beneficios ecológicos asociados a las áreas naturales protegidas, ha incrementado 29 veces la superficie bajo protección estatal, con la declaratoria de la Sierra del Tentzo y el Parque Estatal Valsequillo, asimismo, gracias al apoyo de Conafor, hemos plantado 100 millones de árboles y hemos instalado más de 43 mil estufas para la disminución de uso de leña en 120 municipios”, manifestó Moreno Valle.
“En 2013, el presidente Enrique Peña Nieto, presentó la Estrategia Nacional de Cambio Climático (…) en Puebla, compartimos su visión de que la corresponsabilidad entre países, estados, municipios y ciudadanos, es necesaria para hacer de nuestro entorno un mejor lugar para vivir. Estoy cierto de que es posible hacer compatible el desarrollo económico con la preservación del medio ambiente”, sostuvo el mandatario ante los especialistas de 30 países que, del 30 de octubre al 1 de noviembre, intercambiarán experiencias sobre políticas públicas de combate al cambio climático.
Dondisch Glowinski, resaltó la importancia de que el Diálogo de Cartagena se realice precisamente en esta ciudad, como una muestra del compromiso que tienen México y el estado de Puebla por implementar medidas que contrarresten los efectos negativos de este fenómeno y permitan minimizar sus causas a largo plazo.
“Toda negociación internacional debe sustentarse en acciones locales, el involucramiento de gobiernos, el poder legislativo, sector privado y sociedad civil es fundamental”, agregó Dondisch al recordar que diariamente se lidia con pérdidas humanas, afectaciones a la infraestructura, la seguridad alimentaria, economía y competitividad de las naciones, a consecuencia del cambio climático, por lo que se requiere integrar el conocimiento científico en las políticas públicas si se desea garantizar su éxito.
Los resultados del Diálogo de Cartagena, concluyó, serán fundamentales para la Vigésima Conferencia de las Partes (COP 20), que se llevará a cabo en Perú del 1 al 12 de diciembre, donde deberá obtenerse un nuevo acuerdo climático.
Finalmente, María Amparo Martínez Arroyo, directora general del Instituto Nacional de Ecología y Cambio Climático, refrendó la voluntad de México de continuar la línea de trabajo ambicioso dentro del Diálogo de Cartagena, para fortalecer acuerdos y acciones en torno al cambio climático.
“Este grupo tiene un enorme quehacer para buscar un equilibrio en el régimen climático, la tarea de ser una voz ambiciosa y de conciencia en la negociación internacional. La cumbre de Lima deberá diseñar las bases necesarias para alcanzar un acuerdo en la conferencia de París, un hito definitivo para redactar un acuerdo que nos permita transitar y delinear las trayectorias que nos conduzcan a una economía baja en emisiones de gases de efecto invernadero y hacia un planeta resiliente a los efectos adversos”, señaló.
Agregó que en los últimos años, México ha trabajado con un esquema de consolidación y arreglo institucional que permita hacer frente a las distintas aristas del tema, por lo que desde 2012 existe una Ley General de Cambio Climático que incluye metas de reducción de emisiones en 30 por ciento en 2020, de 50 por ciento en 2050 y una meta para que en 2024, 35 por ciento de la energía consumida esté basada en energías limpias.
También confió en que los trabajos del Diálogo de Cartagena, serán exitosos y de amplia utilidad para las cumbres que se realicen Lima y París, donde deberán definirse acciones concretas para frenar el avance del calentamiento global.
Finalmente, el mandatario poblano recordó que un estudio reciente, mostró que hacer frente a este problema, requerirá destinar el 1 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) mundial a esta tarea, mientras que no hacerlo implicaría invertir el 20 por ciento para enfrentar sus consecuencias, por lo que es urgente implementar soluciones correctivas en el corto plazo, especialmente en países como México, que genera 1.4 por ciento de las emisiones de gases, el décimo cuarto lugar a nivel mundial y segundo en América Latina.
A la reunión asisten especialistas de 30 países para intercambiar ideas y experiencias sobre los temas de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre Cambio Climático (CMNUCC), como financiamiento, adaptación, tecnología y creación de capacidades.
Entre los países participantes se encuentran Alemania, Antigua y Barbuda, Chile, Colombia, Corea del Sur, Costa Rica, Dinamarca, Gambia, Georgia, Ghana, Guatemala, Granada, Indonesia, Islas Marshall, Kenia, Líbano, México, Países Bajos, Noruega, Nueva Zelanda, Panamá, Palau, Perú, Samoa, Suecia, Suiza, Tayikistán, Trinidad y Tobago, Reino Unido, República Dominicana, así como la Unión Europea.
A los asistentes los invitó a conocer la riqueza cultural de Puebla y en especial de la capital, gobernada por el alcalde Tony Gali, presente en el evento.