Fue un primer tiempo de pura identidad culé. Barcelona dominó a piacere en Manchester y a los 15 minutos llegó al primer gol. Messi metió la pelota en el área, donde estaba Luis Suárez. El delantero uruguayo la bajó de cabeza y tuvo la fortuna de que la pelota pegó en Kompany y el rebote le quedó a él para sacar un tiro cruzado y establecer diferencias |
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