MedioTiempo informa que ante un lleno pletórico, Kaká lideró su equipo, aunque sólo le alcanzó para sacar el empate en el debut del Orlando City en la MLS contra el New York City FC, donde David Villa apareció poco, pero se hizo sentir con una asistencia de gol.
La afición local cumplió su parte e invadió el Citrus Bowl como una marea púrpura, que no dejó de cantar durante los 90 minutos. El soccer por fin llegó a Orlando y, aunque su equipo quedó un poco a deber en la cancha, ellos vivieron una fiesta.
Kaká estuvo muy activo desde el inicio y junto al colombiano Carlos Rivas llevó peligro al área de los neoyorquinos, aunque no hubo jugadas claras. Apenas al minuto 12, el brasileño encontró un rebote en el borde del área y sacó un disparo que se fue muy cruzado.
Hacia el final de la primera mitad, el ex del Real Madrid y Milan avisó de nuevo. Esta vez su disparo si fue entre los tres postes, pero el cancerbero Josh Saunders le cerró el paso con una buena atajada.
El equipo local siempre propuso y jugó mejor, pero una sola le bastó a Villa para poner a los suyos al frente. El "Guaje" armó la jugada por la izquierda y habilitó a Mix Diskerud, quien aprovechó un espacio para colocar el balón pegado al poste, con tremendo disparo de parte interna.
Cuando parecía que los de casa se irían con las manos vacías, apareció el astro brasileño, quien ayudado por un desvió de un zaguero, venció la guardia de Saunders en cobro de tiro libre al minuto 91.
Al final, no fue el debut esperado para ninguno de los dos, pero Kaká y Villa demostraron en pocas apariciones que pueden hacer diferencia en sus equipos, que pelearán por la postemporada en su campaña de estreno.
El siguiente compromiso para Orlando será el próximo viernes ante el Houston Dynamo, mientras que el New York City recibirá a New England Revolution el domingo.