Alrededor de seis mil personas llenaron por completo la primera noche de concierto del Auditorio Metropolitano de Puebla en la que Luis Miguel fungió como padrino de lujo.
Durante dos horas los seguidores del llamado “Sol” corearon cada una de las melodías con las que el intérprete repasó más de 30 años de trayectoria artística. "Tu sólo tu", “Sol, arena y mar” y "Suave", fueron los primeros temas de la noche en la que el cantante derrochó energía y demostró que a sus 44 años sigue provocando éxtasis entre sus fieles seguidores.
El ex de Aracely Arámbula integró su repertorio con una serie de popurrís en los que intercaló baladas pop, baladas románticas, boleros y éxitos ochenteros. De esta manera, enfundado en un elegante traje negro entonó "Amor, amor, amor", "Que tu te vas", "Todo y nada", "Sabor a mí", "Sin ti", "Por debajo de la mesa", "La gloria eres tu", "Bésame mucho", "Pupilas de gato", "Alguien como tu", "Hoy el aire huele a ti", "Siento", "Sintiéndote lejos", "Amante del amor", "Más allá de todo", "Fría como el viento", "Tengo todo excepto a ti", "La Incondicional", "Yo que no vivo sin ti", "Culpable o no", "Hasta que me olvides", "Te necesito" y "Esa niña".
A media velada, los diez músicos que lo acompañaron fueron sustituidos por un mariachi de once elementos, mismos que acompañaron a Luismi con “La media vuelta”, “El Viajero”, “México en la piel”, “Si nos dejan”, “Échame A Mí La Culpa”, “Sabes Una Cosa”, “Cielito Lindo”, “Amorcito corazón”, “Que Bonita Es Mi Tierra” y “Viva México”.
Al filo de las once de la noche la euforia siguió con los temas ochenteros: “Separados”, “1+1=2 enamorados”, “Decídete”, “Directo al Corazón” y “Cuando calienta el sol”. Al final el inmueble quedó en la oscuridad total y los asistentes aguardaban el regreso de Luis Miguel, quien complació con un par de temas más: “Dejá Vú” y “Labios de Miel”.