Excélsior informa que la autopsia realizada a Robin Williams develó que el actor padecía una enfermedad mental, llamada demencia de los cuerpos de Lewy (DCL), una afección neurodegenerativa.
Entre los síntomas de esta enfermedad está el deterioro cognitivo, como en el de la demencia por Alzheimer, además de la aparición de síntomas de parkinson, alucinaciones y delirios.
El actor, fallecido el pasado 11 de agosto, tomaba medicamentos contra el parkinson.
Según TMZ, la esposa de Williams indicó tras su muerte que el artista se quejaba por los fármacos y cómo estos le hacían sentir, respuesta que se da entre quienes padecen demencia de los cuerpos de Lewy (DCL).
Según fuentes ligadas a la familia, esta enfermedad habría sido el "factor clave" que llevó a la estrella a quitarse la vida, cuando el actor ganador del Oscar en 1998 (Good Will Hunting), de 63 años, fue encontrado con asfixia por ahorcamiento en su casa en el Condado de Marin, en California.