Fernando Maldonado
Apenas terminaba de pronunciar el “muchas gracias” frente a los miembros del consejo universitario y ya el rector de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla, Enrique Agüera Ibáñez echaba a andar la maquinaria de la que dispone para blindar el periodo que aún tiene al frente de la institución.
Frente al hombre que dirige el destino de la institución educativa superior más importante del sureste del país, las marcadas ausencias del gobernador electo, Rafael Moreno Valle Rosas y su corte: los hombres agrupados en el Consejo Coordinador Empresarial y los rectores de la UDLAP, Luís Ernesto Derbez; y de la UPAEP, el ultra derechista Alfredo Miranda.
Evidente, el vacío hecho al rector el día de su informe tiene una doble lectura que supone un riesgo mayor: el de confrontarse con una universidad que ya ha pagado con sangre los periodos de desestabilización, que también cobró cara la factura a dos gobernadores.
El abuelo del ahora mandatario electo, el general Rafael Moreno Valle y su sucesor, Gonzalo Bautista O’Fárril, ambos de una clara orientación conservadora tuvieron que abandonar el cargo tras la crisis y la polarización en el final de la década de los ’60 e inicios de la ‘70.
Es así como debe interpretarse la frase escogida en el mensaje político de Agüera que el destinatario, ausente distante del Complejo Cultural, acusó recibo: “Que no quede lugar a dudas, el rumbo de la consolidación y las metas para asegurar y blindar los logros obtenidos no tiene retorno”.
Es así que ayer mismo comenzó la renovación de los 35 comités de unidad de facultades, departamentos y trabajadores con miras a la renovación del Consejo Universitario, integrado por 400 miembros.
Desde muy temprano llamó a sus colaboradores más cercanos a la Sala de Rectores de El Carolino para comenzar a operar el periodo sucesorio en el máximo órgano de dirección de la Buap, que le permita mantener la hegemonía dentro de una institución viva y actuante.
En el sótano…
A unas horas de la presentación de los primeros integrantes de la comisión de transición del gobernador electo, Rafael Moreno Valle su ex vocero Pablo Rodríguez se reunía con un grupo de panistas de cepa en un café de la Juárez. La pregunta obligada: O calmaba pasiones, o repartía el juego?
Para cuando la presidenta municipal llegue a la aldea proveniente de Kuwuait una pregunte recurrente será: ¿cuánto costó el viaje y los beneficios para la capital estatal? Es un cuestionamiento constante en redes sociales.
La hipótesis de que el homicidio del líder estudiantil Joel Arriaga hace 38 años sucedió a manos de tribus de izquierdistas cobra fuerza. Aquí las imágenes del expediente que fue guardado desde los tiempos en que radicales de derecha y de izquierda dirimían diferencias a balazos, y hoy son comparsa unos de otros.
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