Con pronósticos que han errado absolutamente, una curva epidémica que ni se “aplana” ni se “dobla” y un creciente número de contagios y muertes por Covid-19, el gobierno lopezobradorista lleva al país a la reapertura de muchas actividades no esenciales el próximo 1 de junio, porque es urgente, ya que tampoco supo prever ni atajar el inexorable desastre económico que se avecina.
El problema de la llamada “nueva normalidad” es el caos que se presagia, ante las tan distintas y tan contradictorias señales y recomendaciones que se ofrecen.
Este viernes, en Palacio Nacional se darán las nuevas indicaciones de prevención ante el fin de la Jornada Nacional de Sana Distancia.
Regirá ahora el sistema del semáforo, que aún está en rojo, rojísimo, en entidades como Puebla.
Lo ha advertido el gobernador Miguel Barbosa, que nuestra entidad tendrá apenas una disminución en la intensidad de la epidemia hasta finales de junio.
La administración de Andrés Manuel López Obrador rechazó la propuesta de zonificar este semáforo, que hicieron algunos gobernadores, en su reunión virtual del martes con la titular de Gobernación, Olga Sánchez Cordero. La misma Olga que horas después, como reflejo del caos en que vive el gobierno federal, reculó y salió a decir que el semáforo federal no es obligatorio dado que cada estado vive situaciones y contextos diferentes.
A pesar de que levantan su pausa las industrias de la construcción y automotriz en muchas entidades -en Puebla será hasta el 15 de junio-, el subsecretario de Salud, Hugo López Gatell Ramírez, ha reconocido que algunas ciudades se van hasta octubre, con los casos de coronavirus en ascenso.
La economía también está en terapia intensiva y necesita con urgencia resucitación.
Se han perdido, entre marzo y abril, 630 mil 593 puestos de trabajo inscritos en el IMSS.
Se espera, según el propio López Obrador, que se pierdan en total un millón de plazas laborales formales por la pandemia.
Para agravar el riesgo del regreso de las actividades, el presidente ha anunciado que retomará sus giras.
Sus inútiles giras.
Prevé estar el 2 de junio en Cancún para dar el banderazo de salida a la construcción del Tren Maya.
¡Qué irresponsabilidad y contrasentido a las recomendaciones de sus funcionarios de Salud!
Este miércoles, López Gatell compareció ante senadores y le llovieron críticas.
El PAN le reprochó los yerros en los pronósticos.
Hasta Morena le reclamó el escaso número de pruebas de Covid que se realizan en México.
Así nos hallamos hoy, a unos días del regreso a muchas actividades.
Estamos como empezamos, sin rumbo y a ciegas.