Si usted fuera un funcionario todopoderoso, profundamente corrupto y con una inmensa fortuna acumulada gracias a los negocios ilÃcitos que ha logrado hacer a su paso por el gobierno, y un dÃa se le ocurriera, digamos, poner clandestinamente su propia ruta de transporte público, pues tiene tanto, tanto, tanto dinero que la verdad no sabe qué hacer con él, y sus amigos y cómplices lo convencen de que es una gran idea porque de millonarios pasarán a mega millonarios, pero usted obviamente no quiere aparecer como socio mayoritario de la empresa, por lo que esto revelarÃa y dejarÃa al descubierto, ¿qué harÃa?: ¿usarÃa cÃnicamente a su cuñado, el mismÃsimo, como su prestanombres?, es decir, ¿al esposo de su hermana, para que aparezca, en lugar suyo, en el acta constitutiva, pensando que nunca, pero nunca jamás, va usted a ser descubierto y tampoco su cuñado y menos, mucho menos su hermana con las manos, las dos, en la masa, pues, repito, se siente usted todopoderoso y por tanto intocable, impune, inalcanzable y piensa que tal condición le durará para toda la vida, de aquà a la eternidad y hasta el último de los últimos dÃas del mundo?
Pues aunque usted no lo crea, eso precisamente eso hizo el compadre de Mario MarÃn, el señor ValentÃn Meneses Rojas, con el esposo de su hermana Lulú, el ya célebre Bertoldo Lucio Sánchez Muñoz, prestanombres y cuñado, cuñado y prestanombres, del ex titular de la extinta SCT en Sistema de Transporte Bicentenario RA Sitrabi SA de CV, la empresa de la ruta Bicentenario A, en la que ValentÃn Meneses, es decir, Bertoldo, tiene el 40 por ciento de las acciones, aunque hoy, en realidad, no quisiera tener una sola, ante la investigación que el gobierno morenovallista realiza para lo que es, repito, sólo la punta de un iceberg enorme, gigantesco, de varias y variadas aristas, caiga quien caiga, tope donde tope, sea quien sea, incluyendo al no menos célebre “góber precioso”, el epicentro de esta, la Historia de Corrupción Más Grande y Jamás Contada de Puebla.