En efecto: al corte del pasado viernes 21, el tracking diario de Opina Consultoría Estratégica daba una ventaja de 11 puntos –en números cerrados- al candidato de la coalición Puebla Unida a la alcaldía capitalina, Tony Gali Fayad, sobre su rival de la alianza 5 de Mayo, Enrique Agüera Ibáñez.
El estudio, que ya incluye el voto consolidado con Movimiento Ciudadano y el Partido Social de Integración, quienes apoyan a Gali en lo que se conoce como candidatura común, es consistente con los resultados de otros contratados a empresas nacionales, pero que no se han publicado.
El tracking de Opina, una de las firmas de mayor credibilidad en el estado y la región, señala que a 15 días de la jornada del 7 de julio, Gali trae una intención de voto de 45.2%.
Es decir, 10.8 puntos efectivos por encima de Agüera (34.4%) y 43.6 puntos arriba de Miguel Ángel Ceballos, del PT, quien con su raquítico 1.6% ha resultado un verdadero fiasco.
Fue la pasada semana, tras el debate, que Tony Gali pudo ampliar su diferencia porcentual respecto a sus contrincantes. Una tendencia que a estas alturas del proceso podría ya resultar definitiva.
El tracking incluye interesantes datos sobre dos importantes variables del voto: decisión y razón del sufragio. Sobre todo de cara a los indecisos –que llegan a aproximadamente 17%- y a lo que se conoce como “voto oculto”, un esquema que no todas las encuestas alcanzan a leer con precisión.
Así, las cifras son elocuentes.
De acuerdo con el informe, 59.5% sí irá a votar y ya decidió por quien lo hará.
15.9% sí sufragará y ya tiene idea por quien lo hará, pero puede cambiar de opinión.
Y 14.5% también irá a las urnas pero todavía no decide por quien.
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Así, según Opina, no sólo no hay empate técnico entre Gali y Agüera, una hipótesis que, sin embargo, se sigue sosteniendo en el cuarto de guerra de la alianza 5 de Mayo de acuerdo con sus propias encuestas.
En realidad, la distancia entre el candidato del PAN-PRD-Panal-CPP y el del PRI-PVEM es hoy de dos dígitos, suficiente (se cree en Puebla Unida) para ganar el 7 de julio, sobre todo si no se cometen errores, si se convence a más indecisos, si se hace un buen cierre de campaña y si la operación electoral del domingo crucial transcurre conforme a lo previsto.
Tal vez por estos números, como una última medida, la alianza 5 de Mayo empezó a subir anuncios espectaculares donde tratan de revivir la relación entre el gobernador Rafael Moreno Valle y la ex lideresa del SNTE, Elba Esther Gordillo, un golpe que luce tardío, impreciso y que más bien revela desesperación por parte de los estrategas del PRI y del ex rector de la BUAP.