Las alrededor de 650 juntas auxiliares del estado de Puebla tendrán los plebiscitos para la renovación de sus alcaldías auxiliares este domingo, con la tradicional intromisión de los partidos políticos, aunque se supone que debieran ser procesos ciudadanos. En la capital, de las 17 que existen, dos encaran un adicional interés: San Miguel Canoa y San Francisco Totimehuacan, ante la posibilidad, nunca tan viva como ahora, de convertirse en el corto o mediano plazos en municipios independientes.
Los pueblos, la provincia más pura del estado, está en sus juntas auxiliares.
Comunidades que administrativamente son satélites de los municipios, aunque muchas de ellas por todo el territorio poblano sean más nutridas en habitantes e importancias económica y social, que las cabeceras.
La tradición también priva en ellas.
Hay municipios, por poner ejemplos de aquí cerquita, como Acatzingo, o Los Reyes de Juárez, en donde no se ve con buenos ojos a los originarios de las juntas y se les ha negado el acceso a la presidencia, si no son de la cabecera.
En el primer caso, hasta donde se recuerda, nunca se ha permitido.
En el segundo, poco, muy poco.
Así en los 217 municipios.
En la capital hay 17 juntas auxiliares, con tradición, usos, costumbres y vida propias.
Aunque jurídicamente se trata de elecciones ciudadanas, de ahí el eufemismo de plebiscitos, en realidad es una disputa política en la que siempre han metido mano los partidos.
Ganar las juntas o la mayoría de ellas, les permite perfilar dominios hacia los procesos constitucionales municipales.
Esa es una importancia vital.
Adicionalmente, como nunca antes, se ha abierto la posibilidad, al menos en opiniones, de que dos de las 17 juntas auxiliares, por su densidad demográfica y dinámica propia, se conviertan en municipios.
San Francisco Totimehuacan, pueblo originario al sur de la capital, y cuyas secciones electorales han definido en los últimos años diputaciones locales y federales.
Algo similar pasa con San Miguel Canoa, de triste referencia por el linchamiento de universitarios, retratado en la película Canoa: memoria de un hecho vergonzoso, de Felipe Cazals.
Apenas el octubre del año pasado, el gobernador Miguel Barbosa refrendó esta intención, que había planteado desde campaña.
Dijo que Canoa y Totimehuacan tienen condiciones para ser municipios.
El alcalde Eduardo Rivera Pérez dijo que está dispuesto al análisis de ese planteamiento.
Para ello, tendría que intervenir el Congreso del estado de Puebla.
Para la erección de dos nuevos municipios: el 218 y 219.
Si es que ocurre.
De ahí este ingrediente en estos plebiscitos, que se definirán en las urnas el próximo domingo.
Un dato adicional es que, en estos procesos, en el municipio de Puebla, solamente 10 mujeres están participando como candidatas.
Los varones son 84.
Otro elemento que evidencia la incipiente aún participación femenina en estos que son los comicios más a ras de suelo de las comunidades.
Se han descartado focos rojos.
Habrá ley seca.
Y habrá nuevas autoridades auxiliares.
Que todo transcurra en paz.
Y que gane la pandilla, perdón, el grupo y/o partido que compre, perdón, opere votos mejor.