Romella
Posted inAnselmo Salvador Chávez Capó

Los aranceles a la vuelta de la esquina

Los aranceles a la vuelta de la esquina
Los aranceles a la vuelta de la esquina
Posted inAnselmo Salvador Chávez Capó

Los aranceles a la vuelta de la esquina

No hay plazo que no se cumpla, durante su campaña presidencial Donald Trump señaló que en caso de ganar impondría un serie de aranceles a las exportaciones mexicanas hacia Estados Unidos, equivalentes al 25% para lo cual el próximo 1 de febrero de 2025, pondrá en marcha esta acción ejecutiva, la cual marcarán una nueva fase en la política comercial de su administración, cabe señalar que aunque en el pasado se han visto las repercusiones de decisiones similares, su regreso al poder representa una intensificación de su enfoque proteccionista, esta acción podría tener efectos tanto positivos como negativos para la economía global.

Desde su primera presidencia, Trump siempre argumentó que el libre comercio no beneficiaba equitativamente a Estados Unidos, sino que favorecía a otras naciones que, según él, aprovechaban las políticas comerciales estadounidenses en detrimento de los intereses nacionales, bajo este supuesto esta línea, los aranceles se presentaron como una herramienta para corregir lo que él veía como un desequilibrio en las relaciones comerciales internacionales, como ejemplo México es el país con el segundo mayor desbalance con 152 mil millones de dólares en 2023, solo detrás de China.

Bajo esta lógica, los aranceles a partir de febrero serían parte de su estrategia para reducir el déficit comercial de Estados Unidos, promover la fabricación nacional y proteger los empleos de los trabajadores estadounidenses el argumento de aranceles para presionar a México en temas de migración. actualmente lo está haciendo de nuevo, sobre todo para presionar en los temas de seguridad fronteriza, control migratorio y el tráfico de estupefacientes, la actual administración norteamericana ha explicado que, en principio, estos aranceles se aplicarán sobre una amplia gama de productos importados, que incluyen desde acero y aluminio hasta productos tecnológicos y automóviles, además, se han argumentado razones de seguridad nacional para imponer restricciones a ciertos productos provenientes de países como China, que, según Trump, no solo compiten de manera desleal, sino que también representan una amenaza para la soberanía económica de EE. UU.

Los aranceles, en teoría, favorecen a los productores nacionales al aumentar el costo de los productos importados, lo que puede incentivar el consumo de productos locales, muchas empresas estadounidenses dependen de las exportaciones mexicanas como parte de sus cadenas de suministro integradas, especialmente en la industria automotriz y electrónica. En el caso de establecer aranceles de 25% podrían aumentar los costos operativos y reducir la competitividad de estas empresas.

Uno de los efectos inmediatos que se prevé es un incremento en los precios de los productos importados, lo que afectará directamente al consumidor estadounidense, estos aumentos podrían extenderse a sectores tan variados como la tecnología, la automoción e incluso la ropa, productos en los que la dependencia de las importaciones es notable, si bien algunos sectores podrían beneficiarse de una mayor demanda interna de productos nacionales, otros, como el comercio minorista, podrían enfrentarse a márgenes más reducidos debido a los mayores costos han demostrado que los costos de los aranceles suelen ser absorbidos por los consumidores. Esto generaría un alza en los precios de bienes esenciales y una posible caída en el poder adquisitivo, lo que va en contra de las intenciones de Trump.

Los efectos potenciales para la economía mexicana eventualmente implicarían una disminución del Producto Interno Bruto (PIB) en diversas proporciones, en el caso de aplicar tasas a partir del 10.0%; además queda por ver a qué sectores se aplicarían. reduciría el PIB en alrededor de 2 por ciento en México; así mismo el impacto en el crecimiento disminuiría aproximadamente 3.5% con un arancel general del 25%, en el eventual caso de que no aplican aranceles, la incertidumbre sobre la política comercial puede generar un impacto negativo de entre 0.5 y 1.0% el PIB de México.”.

Los aranceles que Trump impondrá a partir del 1 de febrero de 2025 representan una nueva fase de su enfoque proteccionista, que busca equilibrar las relaciones comerciales y proteger los intereses nacionales de Estados Unidos, sin embargo, es importante reconocer que estas políticas no son una solución mágica.

Si bien pueden beneficiar a ciertos sectores, también tienen el potencial de aumentar los costos para los consumidores y generar fricciones con los socios comerciales internacionales. A nivel global, la medida generará tensiones en las relaciones comerciales, particularmente con países como China, Canadá, México y la Unión Europea, quienes podrían responder con aranceles propios, desencadenando lo que podría convertirse en una guerra comercial a gran escala, las economías emergentes también sentirán los efectos, pues dependen en gran medida de la exportación de bienes a Estados Unidos.