El 20 de marzo se dio a conocer la noticia del fallecimiento de Elena Larrea, activista y fundadora de Cuacolandia, un santuario para caballos maltratados y abandonados ubicado en Atlixco, Puebla.
Las personas que conocieron a la joven de 31 años la describieron como una mujer valiente, fuerte y que no se detenía ante nada, ni nadie. También como una mujer muy humana, ya que la causa por la que luchaba era noble y generosa. Era una defensora incansable de los derechos de los animales.
Durante una entrevista para Infobae, Larrea comentó que desde muy joven fue jinete, una pasión que hasta la actualidad mantenía. Desde entonces surgió su amor por los caballos. Tiempo después creó el santuario como una forma de “Regresarle algo a los caballos de lo mucho que me han dado”.
En 2019 comenzó su lucha por el bienestar animal y también en ese año fundó Cuacolandia, el refugio para animales maltratados y abandonados. En este sitio se recibía a caballos, yeguas, mulas, burros y cualquier otro equino que viviera una situación de maltrato.
El mantenimiento de este espació resultó en una actividad demandante y costosa. Pues entre comida, consultas médicas, tratamientos especiales para los animales y otros gastos, Larrea tenía que juntar aproximadamente un millón de pesos al mes. A todo esto, se sumó la crisis por la pandemia de covid-19.
Aunque cualquiera se hubiera desanimado y renunciado al proyecto, Elena siguió adelante. Con el objetivo de no cerrar Cuacolandia y siguiendo el consejo de varios amigos, Elena decidió abrir una cuenta de OnlyFans. Gracias a los ingresos que obtuvo en la plataforma, la activista pudo continuar con el santuario.
Mila
Sin duda, la lucha más emblemática de Larrea fue la de Mila. Una yegua que sufrió maltrato y además fue víctima de zoofilia en Coronango, Puebla.
Este caso se hizo visible en febrero de 2024 gracias a que en redes sociales se compartió un video en el que se exhibía el maltrato que sufría Mila. Sus dueños la obligaban a transportar cargas muy pesadas, la golpeaban y por si fuera poco la abusaban sexualmente.
Después de que se exhibió este caso, el Instituto de Bienestar Animal (IBA) y Cuacolandia rescataron a Mila. Desde ese momento la potranca estuvo en el hospital y aunque su estado de salud era grave, sobrevivió e ingresó al santuario de equinos.
Debido a este caso y a las exigencias que Elena Larrea y otros animalistas hicieron para tipificar la zoofilia como un delito, el 15 de febrero de 2024 el Congreso de Puebla aprobó castigar la zoofilia hasta con cuatro años de prisión y multas económicas que oscilan entre 10 mil y hasta 43 mil pesos.
¿De que murió la fundadora de Cuacolandia?
El miércoles 20 de marzo se dio a conocer que Elena Larrea falleció debido a una trombosis pulmonar. Esta información y otros detalles los compartió el equipo de Cuacolandia en sus redes sociales.
También, el colectivo Movimiento Animalista de Puebla confirmó y lamentó su fallecimiento con el siguiente mensaje:
Lamentamos profundamente el fallecimiento de nuestra compañera de causa y amiga Elena Larrea. Fundadora de Cuacolandia, aguerrida activista y protectora de animales, su huella permanece en nuestros corazones y rescatados por ella”.
Tras la noticia de la muerte de Elena y los cuestionamientos sobre qué pasaría con los animales rescatados, el gobernador de Puebla, Sergio Salomón compartió un mensaje en su cuenta de X.
En el cual lamentó la muerte de la activista Elena Larrea y explicó lo que sucedería con los animales.
Informamos que a través de la Secretaría de Medio Ambiente, garantizaremos el resguardo de los ejemplares que se encuentran en Cuacolandia, derivado de procedimientos del IBA”, escribió el gobernador en su cuenta de X.
Elena Larrea dejó un legado imborrable en la historia de la defensa de los animales, pues su valentía, compromiso y generosidad inspiraron grandes cambios como la tipificación de la zoofilia como delito en Puebla.