La secretaria de Medio Ambiente, Myriam Arabian Couttolenc, señaló que el gobierno municipal tiene identificadas 900 palmeras en todo el municipio que se encuentran enfermas con algún tipo de plaga y que la siguiente administración deberá de seguir con el tratamiento y cuidado de los ejemplares.
En entrevista, Arabian Couttolenc sostuvo que calculan que serán otros 5 y hasta 10 años con este tipo de plagas, puesto que se tienen que probar diversos tratamientos y esperar a ver como reaccionan para determinar si continúan con este tratamiento o si es necesario remover el ejemplar, como lo han hecho a lo largo de estos tres años.
Mencionó que, al tratarse de ejemplares vivos, es necesario que se monitoreen su evolución y cuidar que no les caigan otro tipo de enfermedad, por lo cual es un trabajo que tiene que ser constante y al que se le debe de dar continuidad.
Resaltó que en el caso de las palmeras que no reaccionaron de manera favorable al tratamiento que se les aplicó, fueron retirados y sustituidos por otras especies, y citó el caso del bulevar 5 de Mayo, en donde se plantaron los fresnos y el de la avenida Juárez en donde se colocaron especies de Washingtonia y otros fresnos.
Sobre los árboles que se cayeron por las lluvias de las semanas previas, la funcionaria municipal sostuvo que este tipo de situaciones se dan debido a que cuando fueron plantados no se hizo un diagnostico previo sobre el crecimiento de las raíces.
Detalló que desafortunadamente muchos arboles fueron colocados sin considerar que las raíces crecerían o de que tamaño lo harían, o en su defecto que no tenían la profundidad adecuada para crecer, por lo cual con el paso del tiempo y las lluvias hacen que no tengan soporte suficiente y se caigan.
Mencionó que, ante esta situación, es importante se haga un protocolo que indique que no s puede plantar arboles sin que se haga un estudio previo para evitar accidentes en el futuro, situación que tiene que manejar el área de Desarrollo Urbano e Infraestructura.
Apuntó que la dependencia a su cargo se encuentra haciendo dictaminaciones de árboles que pueden caerse, ya sea de reportes ciudadanos y de los propios recorridos que hacen, para poder canalizarlos a Servicios Públicos, ya que ellos son los encargados de la poda y/o derribo de los ejemplares.