Cientos de ciudadanos se sumaron este domingo a la marcha en defensa de la democracia, que recorrió las principales calles del Centro Histórico de Puebla.
La movilización fue un éxito y una réplica de las que se llevaron a cabo en la CDMX y otros puntos del país y el extranjero.
Hubo consignas en contra del presidente Andrés Manuel López Obrador y a favor de la autonomía del INE.
En la de la CDMX el gobierno capitalino calculó 90 mil asistentes, pero fueron muchos más.
La de Puebla se vio empañada por la asistencia de candidatos del PAN-PRI-PRD a cargos de elección popular, como Eduardo Rivera Pérez y Mario Riestra.
A la de la CDMX la candidata de la oposición a la Presidencia de la República, Xóchitl Gálvez, evitó acudir porque, según explicó, se trataba de una marcha ciudadana, no partidista.
Desde Puebla, donde cumple gira de trabajo, el presidente López Obrador dijo que la manifestación es la mejor muestra de que México es un país libre, pero llamó “alcahuetes” a los participantes.
Señaló que se quedaron callados ante los “fraudes” electorales de 2006 y 2012 y que ahora reclaman el regreso de la corrupción.
Mismo discurso que manejó la candidata de Morena a la Presidencia, Claudia Sheinbaum, al acudir al INE a registrarse.