LA SEGUNDA DERROTA DEL PAN PUEBLA ANTE EL TEPJF
Arturo Luna Silva
Como si el horno estuviera para bollos en la alianza opositora, de nuevo han sancionado al PAN Puebla, ahora por irregularidades fiscales.
En esta ocasión, el partido encabezado por Augusta Valentina Díaz de Rivera deberá pagar 2.7 millones de pesos por omitir operaciones y acciones que realizó en las pasadas precampañas.
Pero, en honor a la verdad, Augusta no tiene la culpa, o no toda la culpa.
Y es que ni el secretario general, Marcos Castro, ni el contador del partido, Jesús Cortés, dan una, y todo parece indicar que o simulan o traicionan o hacen todo por dejar en ridículo a la que en teoría es su “jefa”.
Castro ya amarró una diputación plurinominal y lo que pase con la dirigente estatal del PAN, le vale un cacahuate y la mitad de otro, a pesar de que muchas de sus torpezas tienen al partido como lo tienen, en más de un sentido.
Este jueves nos enteramos que la Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) resolvió el pasado 13 de marzo el juicio SUP-RAP-64/2024 presentado por el PAN poblano contra 14 observaciones emitidas por el Instituto Nacional Electoral (INE).
Estas observaciones surgen de la resolución INE/CG153/2024 con la que el INE fiscalizó los gastos de las precampañas de finales del 2023 en Puebla, para los cargos de elección local.
Una de las observaciones que el PAN intentó evitar fue la 1-C14-PAN-PB por más de 2.1 millones de pesos que el órgano electoral determinó, porque en sus eventos celebrados no reportaron propaganda con un valor por 1.4 millones de pesos.
El partido azul consideró que se debía revocar la multa por 2.1 millones de pesos porque, según los genios de Acción Nacional, no tiene obligación alguna de agregar la “evidencia fotográfica de los gastos”, a lo que el TEPJF respondió, con gran ironía, que este es “un argumento novedoso” del recurrente.
Otra de las multas más altas que el PAN poblano intentó evitar fue la 1-C13-PAN-PB por 431 mil 520 pesos por propaganda en internet no reportada, pues defendió que “fue anexado de manera detallada en archivo Excel”, pero la Sala Superior analizó que no hay “muestras que permitan vincular los gastos no reportados con la documentación”.
En resumidas cuentas, un desastre.
Las recientes sanciones por las precampañas del PAN de Puebla se suman a la multa por 5.4 millones de pesos que el INE le impuso por irregularidades fiscales del ejercicio 2022 y que también intentaron evitar ante la Sala Superior del TEPJF, caso reportado aquí puntualmente.
El pasado 28 de febrero, la Sala Superior desechó la demanda del PAN poblano con la que pedía revocar la multa, luego de que la Sala Regional de la Ciudad de México del TEPJF ratificó las sanciones.
De acuerdo con la resolución del INE, el monto más alto en observación fue el 1.22-C22-PAN-PB por 4.4 millones de pesos por timbrar de forma extemporánea comprobantes fiscales sobre sueldos del personal del PAN.
Tras detectar la comprobación de sueldos extemporánea se decidió aplicar una multa por 5 por ciento del monto total en observación, lo que representó ser poco mayor a 223 mil 194 pesos.
Otra de las observaciones más altas fue la 1.22-C3-PAN-PB por 3.8 millones de pesos por no comprobar los pagos realizados para videos, asesorías, estudios y gastos de sus comités, por lo que la sanción fue del 100 por ciento del monto.
Total, que en el PAN de Puebla siguen cometiendo error tras error, pifia tras pifia, a punto de empezar la campaña estatal y en detrimento principalmente de su candidato a gobernador, Eduardo Rivera Pérez, quien no debe estar precisamente contento.
A ver qué dice a Augusta Díaz de Rivera, Marcos Castro y el contador, Jesús Cortés ahora que regrese de su paseo por Nueva York.