La oposición a Morena se sabe derrotada por anticipado y ya tira de manual para “de lo perdido, lo que aparezca”.
Panistas, priistas y demás fauna política ya gritan, por anticipado, “¡fraude!”.
Ya se tiran al suelo y acusan: “¡Robo!”.
Ya levantan la voz con la cantaleta de: “¡Elección de Estado!”.
Ya recurren a montajes propios de una película de Viruta y Capulina.
Ya demandan “¡la destitución del señor fiscal!”.
Ya atacan en lo personal a “ese gobernador que… bla-bla-bla-bla-blaaaa”.
Ya piden tres mil debates, en televisión abierta, para más señas, y en horario prime, de ser posible.
Ya hablan de “¡prensa vendida!”…
Ya se victimizan y lloran por los rincones como muñecas feas.
Es decir, todo lo que hacen cuando saben que van perdiendo.
Y, sobre todo, cuando saben que ya ni el tiempo ni el dinero les alcanzan.
¿De verdad quieren llevar a este terreno el proceso electoral en Puebla?
¿En serio le apuestan a la judicialización de los comicios?
¿Esa es la idea?
¿Su gran plan?
¿Ganar -otra vez- en la mesa lo que no ganan en las urnas?
Recuerden 2018.
Véanse en ese espejo.
¿Será mucho pedir a los hijos (y malos aprendices) de Rafael Moreno Valle?
PAN ROMPE ACUERDO EN CONGRESO DEL ESTADO
En esa dinámica, el PAN rompió este jueves el acuerdo al que habían llegado todos los grupos parlamentarios para no convertir el Congreso del estado en un ring de lucha libre.
Enviado por sus jefes, un diputado de nombre Miguel Espinosa de los Monteros subió a tribuna el caso de la supuesta amenaza a Mario Riestra.
Lloriqueó, balbuceó un par de cosas, se desgarró las vestiduras y se ajustó al guion que le escribieron en el cuarto de guerra de Eduardo Rivera.
La diputada de Morena Azucena Rosas Tapia le contestó y dijo que el asunto Riestra es un montaje -un mal montaje- y una fallida estrategia del candidato del PRIANRD a la presidencia municipal de Puebla.
Acusó a Acción Nacional de violentar con sus falsas acusaciones al estado y pidió dar altura al debate legislativo.
El presidente del Congreso, Édgar Garmendia, tampoco se quedó callado y señaló que lo electoral debe quedarse en el terreno electoral.
Pidió no usar la tribuna para desahogar resentimientos y politiquerías, así como evitar calumnias y chantajes.
Total, que la guerra electoral llegó al Palacio Legislativo y gracias a que la bancada del PAN no sabe lo que es respetar un acuerdo.
LUPITA CUAUTLE, ARRIBA
Ni la guerra sucia ni los golpes bajos ni las campañas de odio han logrado frenar la carrera ascendente de Lupita Cuautle rumbo a la presidencia municipal de San Andrés Cholula.
La más reciente encuesta (de Más Data) le otorga una ventaja de nueve puntos sobre su más cercano rival, Víctor Correau Galeazzi, de Morena, quien pierde puntos semana a semana.
Para como van las cosas, San Andrés Cholula se dirige a ser el más importante bastión que posiblemente le quede al PAN en el estado tras la elección del 2 de junio.
El de Lupita Cuautle y de su esposo, el actual alcalde, Edmundo Tlatlehui, podría emerger como el grupo que se apodere del partido, si Morena logra ganar la gubernatura, el Congreso local y las principales alcaldías del estado.
EL ARZOBISPO Y LOS CANDIDATOS
Ya comparecieron ante las principales universidades del estado y ahora tocó el clero.
Por separado, Alejandro Armenta y Eduardo Rivera sostuvieron un encuentro privado con el arzobispo de Puebla, Víctor Sánchez Espinosa.
Hay que precisar: el muy influyente arzobispo de Puebla, Víctor Sánchez Espinosa.
Cada quien dio cuenta de ello a través de sus redes sociales.
No hubo mayor información en el caso de Eduardo Rivera.
De hecho, no está claro si dichas reuniones sucedieron el mismo día, dado que, en las fotos difundidas, el arzobispo aparece con ropa diferente y en sitios diferentes.
Del encuentro con Alejandro Armenta se sabe que el trato fue muy cálido.
El candidato de Morena-PVEM-PT-Nueva Alianza-FxM es católico practicante y lo saluda personalmente al menos una vez al mes.
Víctor Sánchez y Alejandro Armenta hablaron de generar un clima de tranquilidad en el proceso electoral y evitar las guerras sucias.
El arzobispo le recomendó mesura y prudencia ante los ataques que viene recibiendo en redes sociales, así como alejarse de las diatribas, las propias y las ajenas.
Históricamente, no hay candidato a gobernador que no haya pasado por la “báscula” -o más bien el confesionario– del jefe de la Iglesia católica poblana.
Todo mundo sabe de su importancia, influencia y poder sobre miles y miles de creyentes.
No es que esté metido en las campañas o que haga proselitismo por nadie; es -por la naturaleza de su función- un actor social y político de primer orden, por lo que no es ocioso preguntar:
¿A cuál de los dos dio la bendición monseñor Sánchez Espinosa?
FERIA, UN OASIS EN MEDIO DE LA GUERRA
Con gran éxito arrancó la edición 2024 de la Feria de Puebla.
El gran evento de los poblanos y las poblanas, y del que todos y todas debemos sentirnos orgullosos, llega como un verdadero bálsamo en medio de las campañas de un proceso electoral eterno y aburrido, que ha desgastado a una sociedad harta de la clase política en general.
Hasta el próximo 12 de mayo, la Feria será un auténtico respiro para miles de ciudadanos que observan, entre impasibles e impotentes, la cruenta lucha por el poder que libran los candidatos y las candidatas a los diversos cargos de elección.
Con un cartel de artistas, shows y exposiciones de primer nivel, la zona de los Fuertes de Loreto y Guadalupe se convertirá en el epicentro de mucho de lo bueno que Puebla tiene para ofrecer al mundo.
El gobierno de Sergio Salomón Céspedes Peregrina ha hecho un esfuerzo encomiable para ofrecer una Feria a la altura de nuestro estado, de nuestra historia, de nuestra cultura, de nuestra sociedad…
En 2023, el evento registró más de 1.2 millones de asistentes.
La entidad se logró posicionar en la agenda nacional del divertimento y atrajo a más de 160 mil turistas, lo que generó una derrama económica de más de 5 mil millones de pesos.
No tengo dudas de que este año se superarán estas cifras, lo que redundará en beneficio de -y para- todos.
Así que a disfrutarla, si se puede en familia, y sobre todo a recibir a los visitantes como se merecen.