Las Afores son uno de los elementos centrales de la economía mexicana, durante 2024 han manejado un total de más de 5 billones de pesos en activos, presentando un crecimiento sostenido en comparación con años anteriores, reflejando la importancia creciente de la planeación financiera de los mexicanos.
Sin embargo, el entorno económico global, marcado por la volatilidad en los mercados financieros, la inflación y el aumento en las tasas de interés, ha impactado el rendimiento de las inversiones de los fondos.
Uno de los fenómenos más relevantes en el sistema de Afores en 2024 es el aumento en los retiros parciales y anticipados que se están presentando en el sistema, la incertidumbre económica y la inflación han llevado a muchos trabajadores a recurrir a sus ahorros para el retiro antes de tiempo, ya sea para enfrentar emergencias financieras o para cubrir gastos imprevistos.
Este aumento en los retiros parciales es un reflejo de las presiones económicas que enfrentan muchas familias mexicanas, sin embargo, esta práctica puede tener consecuencias graves a largo plazo, reduciendo el monto disponible para el retiro y comprometiendo la seguridad financiera en la vejez.
El rendimiento promedio de las Afores en los primeros seis meses de 2024 ha mostrado una recuperación moderada en comparación con 2023 un año que fue especialmente complicado debido a la alta inflación y la incertidumbre económica global, no obstante, la rentabilidad sigue siendo un tema de preocupación para muchos ahorradores, ya que, la rentabilidad promedio anualizada a junio de este año se situó en un rango de aproximadamente 5% a 7%,quienes se encuentran más atentos a esta variable son aquellos próximos a la edad de retiro, un dato muy preocupante para la economía mexicana es que los retiros en el ahorro de los trabajadores por desempleo ascendieron a 3,007 millones de pesos durante julio del 2024, marcándose un récord histórico.
Los retiros por desempleo de la Afore son una ayuda para la población económicamente activa que se queda sin trabajo, cabe señalar que se puede acceder a este beneficio una vez cada cinco años.
El monto al que se puede acceder por retiro parcial por desempleo de la Afore en México depende de varios factores, incluyendo el saldo acumulado en la cuenta individual y el tiempo que el trabajador ha cotizado al IMSS.
A julio de 2024, existen dos modalidades principales para calcular el monto que se puede retirar:
- Modalidad A:
o El trabajador puede retirar 30 días de su salario base de cotización, considerando un salario promedio de los últimos 250 días.
o El monto máximo no puede exceder el equivalente a 10 veces el valor de la Unidad de Medida y Actualización (UMA) mensual. - Modalidad B:
o El trabajador puede retirar el 11.5% del saldo de la subcuenta de RCV (Retiro, Cesantía en Edad Avanzada y Vejez).
o Este monto es mayor si el trabajador tiene más tiempo cotizando y un mayor saldo acumulado. Es importante destacar que, para poder acceder a este beneficio, el trabajador debe haber cotizado al menos 3 años al IMSS y haber tenido su cuenta Afore activa por al menos 5 años.
Además, el retiro por desempleo reduce las semanas de cotización acumuladas, lo cual puede afectar el monto de la pensión futura si no se reponen las semanas retiradas. Por lo tanto, pese a que los retiros por desempleo son una gran ayuda para momentos difíciles, tienen implicaciones negativas para el ahorro y la pensión, las principales consecuencias son que el ahorro para el retiro disminuye, así mismo se descuentan semanas de cotización, las cuales son el tiempo que el trabajador debe sumar, de su vida laboral, en el sistema formal para obtener una pensión.
Actualmente un trabajador que se retire bajo el régimen de pensiones de 1997 debe tener mínimo 850 semanas de cotización, las personas que hayan retirado dinero bajo el concepto de desempleo, pueden regresar ese dinero a la Afore con la finalidad de que ésta les reintegre las semanas de cotización que se les hayan descontado.
A julio de 2024, el sistema de Afores en México se encuentra en un punto de inflexión, aunque se han logrado avances significativos en la acumulación de ahorros para el retiro y en la mejora de la regulación, aún persisten desafíos importantes, la clave para el éxito futuro del sistema reside en la capacidad de adaptarse a los cambios demográficos, económicos y tecnológicos, así como en la promoción de una cultura de ahorro a largo plazo que garantice la seguridad financiera de todos los mexicanos.