El Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) da a conocer los resultados del Índice Nacional de Precios al Consumidor para el mes de junio del 2024, cuyo resultado presentó un aumento de 0.38% respecto al mes anterior. La inflación general anual se ubicó en 4.98% en el mismo mes de 2023 y durante este año el indicador no ha presentado una tendencia a la baja. La inflación mensual fue de 0.10% y la anual, de 5.06%.
De manera disgregada en los dos índices que lo conforman, el índice de precios subyacente a tasa mensual incrementó 0.22%. El que mayor incremento presentó fue la vivienda, con 0.35% a su interior, mientras que el que menor incremento se registró en la educación, con un 0.06%.
El índice de precios subyacente a tasa anual incrementó 4.13%; el mayor incremento fue en la educación con un 6.35% a su interior, mientras que el que menor fue en las mercancías alimentarias, con 2.16%.
Por su parte, el índice de precios no subyacente registró un alza de 0.87% mensual; el mayor incremento que presentó fue en las frutas y verduras con el 3.27% a su interior, mientras que el menor fue en los productos pecuarios con una disminución de 0.02%.
En lo que corresponde al índice de precios no subyacente a tasa anual, incrementó 7.67%; el que mayor incremento presentó fue en las frutas y verduras con el 19.37% a su interior, mientras que el de menores aumentos fue en los productos pecuarios con un 2.89%.
La inflación que mayor incremento presentó fue la no subyacente en el renglón de los agropecuarios, de manera específica en frutas y verduras, que como ya se señaló fue de 10.36% anual.
En el apartado de las frutas y verduras registraron una inflación de 19.73% en cinco meses para ligar siete meses con tasas de doble dígito.
A manera individual, el chayote presentó una inflación mensual de 128.58% en junio; la naranja, 31.37%; el aguacate, 17.65% y los plátanos se encarecieron 13.98%.
A tasa anual, el chayote reportó una inflación de 113.58%; el tomate verde, 49.70%, el aguacate 39.97% y la naranja, de 37.79%.
El otro rubro de la no subyacente, referente a los energéticos y tarifas autorizadas por el gobierno, mostró un incremento de 6% a tasa anual durante junio, lo que representó su nivel más alto en los últimos 18 meses.
Por lo tanto, la gasolina presentó un incremento mayor a la inflación, por lo que los consumidores han tenido que pagar 1.50 pesos más por cada litro que compran respecto al inicio de año.
Revisando la información de manera histórica en la primera semana de 2024, los consumidores a nivel nacional pagaron, en promedio, 22.99 pesos por litro de gasolina regular y al cierre del primer semestre del año deben costear 24.49 pesos.
De manera desagregada, el 41.2% (10.09 pesos) de estos 24.49 pesos por litros se debe al pago de impuestos (IVA+IEPSoimpuestosfederales/esta- tales).
El 28% (6.86 pesos) se debe al costo de refinación.
El 23% (5.63 pesos) depende del precio del petróleo crudo.
El restante 7.8%(1.91 pesos) se debe a costos de distribución y marketing.
Cabe señalar que en estos momentos la gasolina verde es 7.84 pesos más cara que en Estados Unidos, en donde actualmente, el precio promedio se ubica en 16.65 pesos por litro, debido, en gran medida, a que pagan menos dinero por refinar el petróleo crudo y no pagan tantos impuestos.
Finalmente, debe considerarse que la inflación no acumulaba cuatro meses consecutivos al alza desde enero-abril del 2021, además ya suma 40 meses por en- cima del rango objetivo del Banco de Mé- xico que es de 3 por ciento +/- un punto porcentual.
Al observar que la inflación se aceleró más de lo esperado en junio se complican sus esfuerzos para recortar las tasas de interés, que permanecen cerca de un máximo histórico, lo cual ocasiona que el costo del dinero siga siendo alto y limita la capacidad de consumo en el mercado inter- no, que es aún buena, pero pudiera empezar a disminuir debido a la falta de liquidez en el mercado.