Dos agentes de policía y un paramédico murieron este domingo en un tiroteo en la localidad estadounidense de Burnsville (Minnesota), tras acudir a un domicilio por una denuncia de violencia doméstica, confirmaron las autoridades locales.
El gobernador del estado, el demócrata Tim Walz, dijo en su cuenta de X que dos agentes de policía y un bombero perdieron su vida “mientras respondían a la llamada de una familia en peligro”, y añadió que hubo más agentes heridos.
Por su parte, una oficina del Departamento de Seguridad Pública de Minesota reveló que el atacante perdió también la vida, y dijo que dará más detalles cuando termine su investigación preliminar.
Según el periódico Pioneer Press, que cita a fuentes policiales, los agentes acudieron a una residencia de la localidad de Burnsville para responder a una llamada por violencia doméstica, y se vieron envueltos en un tiroteo.
El medio Star Tribune, por su parte, explica que el paramédico fue disparado cuando trataba de ayudar a uno de los agentes heridos.
La senadora demócrata por Minesota, Amy Klobuchar, escribió hoy en X que se ha enterado por la policía del incidente. “John (el marido de la senadora) y yo rezamos por ellos, sus familias y el Departamento de Policía de Burnsville esta mañana”, escribió.
Además, diversas organizaciones policiales y políticos del estado enviaron mensajes de apoyo durante la mañana a las familias de las víctimas en redes sociales.
Con información de EFE