México no pudo con Japón y cayó 1-3 en el partido por el quinto puesto del Torneo Maurice Revello.
Desde el comienzo del partido, los mexicanos juegan alto en el campo y multiplican los centros en la jaula de Rui Araki. En un balón que parecía inocuo en profundidad, Ettson Ayon lee mejor la trayectoria que su vis-à-vis japonés y se ofrece un primer cara a cara. Su golpe topé terminó en los guantes del portero japonés.
En el 21′, Soma Kanda abre el marcador, después de un movimiento bien construido. Los japoneses se centran en el segundo poste donde el máximo goleador de la competición (4 logros) termina con una cabeza aplastada.
Luego, algunas incursiones mexicanas, especialmente a través de Riccardo Monreal, pero ninguna oportunidad franca hasta el 40. Después de un desbordamiento en el lado derecho, el lateral mexicano central en la cuerda para Ettson Ayron, que se despronunció.
Su recuperación se filtró con el primer poste de la jaula japonesa. Justo antes del descanso, un uno-dos entre Fidel Ambriz y Rodrigi López permite a la primera ciudad permitirse un golpe lejano que obliga al portero japonés a volver a trabajar.
En la segunda mitad, el regresado Ramiro Ariga destaca con un buen golpe con el plano del pie, todavía rechazado por el portero japonés. 10 minutos después, en una acción que parecía inofensiva, Fidel Ambriz presiona mal un pase hacia atrás hacia su gol, Kento Shiogai lo intercepta, el número 14 solo tiene que terminar en el gol vacío para dar una ventaja de dos goles a su selección.
México continuó su dominio pasando por los lados a través de centros bien sentidos. La selección de Ricardo Cadena se creará en varias ocasiones, pero el portero Rui Araki se interpondrá cada vez. Tras una pérdida de balón de Kofie Chukuniereshota, los compañeros de equipo de Fidel Ambriz vuelven a golpear la muralla japonesa.
Siempre acorralados, los japoneses sufrieron pero no se rompieron. Gracias a su portero y a las milagrosas intervenciones de la defensa, Japón mantuvo su jaula inviolada. Todavía se inclinó en el minuto 84. Tras una nueva pérdida de balón de Kofie Chukuniereshota, el poderoso golpe en el primer poste de Ramiro Arciga devolvió la esperanza a México.
El agitado final del partido, marcado por un altercado entre Jesús Alcantar y Kento Shiogai, que les valió una expulsión, vio a México seguir empujando, sin éxito. Un contraataque relámpago liderado por Keita Kosugi y terminado por Hisatsugu Ishii puso fin a cualquier esperanza mexicana de volver al juego.