La Alianza Nacional de Pequeños Comerciantes (ANPEC) realizó un sondeo sobre el costo que puede llegar a representar las graduaciones y las vacaciones.

El evento de fin de cursos en nivel básico (preescolar, primaria y secundaria) implica un costo promedio de $5,800.00, lo que representa un incremento del 20% en comparación al año pasado de $4,850.00, incluyendo boletos para seis personas para la fiesta de graduación $1,800.00, la compra del vestido o traje para el pequeño $1,100.00, zapatos $600.00, peinado y maquillaje en el caso de las niñas $700.00, el vestuario para el bailable $800.00, un paquete de fotografías $500.00 y el convivio del menor en su salón $300.00.

Claramente los padres de familia han caído en una era de consumismo y gastos superfluos innecesarios en lo que refiere a las graduaciones de educación básica.

Mientras que la graduación en nivel bachillerato y licenciaturas llega a los $15,200.00 en promedio, que representa un aumento del 24% con relación al año pasado de $12,300.00. La mesa para diez personas de la fiesta de graduación $6,500.00, comprar el vestido o traje $2,000.00, zapatos $1,000.00, peinado y maquillaje para las damas $1,300.00, obsequios de graduación $1,300.00, paquete de fotografías $1,500.00, fiesta con amigos $800.00 y la ceremonia de diplomas $800.00.

“Para los padres de familia la batalla por cubrir los gastos del hogar es infinita. En verano esta se vuelve un verdadero calvario por los gastos extraordinarios que significan las graduaciones y vérselas con los hijos en casa todo el día por las vacaciones. A los pequeños comerciantes nos va muy bien con las ventas en este periodo, ya que un cliente estelar en nuestros puntos de venta son los niños y jóvenes encargados de hacer los mandados en la casa y, estando de vacaciones, cuanto más; sin embargo, también somos padres de familia y sabemos lo duro que es lidiar con los gastos de esta temporada”, explicó Cuauhtémoc Rivera, presidente de ANPEC.

Respecto a las actividades vacacionales podemos reportar que los campamentos recreativos tienen un costo promedio de $2,000.00 por semana por niño, mientras que salir en familia al cine puede llegar a costar $1,300.00, incluyendo las entradas, alimentos y pasajes. Un plan más tranquilo como ir al parque público a hacer un picnic con sándwiches, papas y refrescos supone un gasto de hasta $600.00 o asistir a centro comercial y comer en un restaurante de comida rápida, ya sea de hamburguesas o pizzas con postre incluido, llega a costar $900.00 aproximadamente.

Si hablamos de salir de vacaciones un fin de semana largo de cuatro días y tres noches, alimentos y traslado en autobús a Acapulco implica un gasto aproximado de $17,000.00 o a Tuxpan $16,000.00. Si se prefieren otros destinos turísticos del centro del país como San Miguel de Allende y Zacatecas, significan un gasto estimado para estas vacaciones de $16,000.00 y $21,500.00, respectivamente.

Estos costos considerados para una familia de cinco miembros tuvieron un incremento en promedio de 19% en comparación al año pasado.
“Como si el gasto económico fuera poco, el desgaste para los padres de familia es mucho más que eso. Esta temporada rompe con la cotidianidad y el orden establecido en la rutina de los hogares, que inicia al despertar preparándose para ir a la escuela, el traslado para llegar y después recoger a los niños a la hora de salida, por la tarde las actividades extraescolares y al fin de la jornada reunirse en la cena para comentar cómo les fue durante el día, iniciando de nuevo la mañana siguiente con la misma rutina”, refirió Rivera.

Las vacaciones es un “rompan filas” con más desafíos: ¿dónde dejar a los niños?, ¿con quién?, ¿podemos llevarlos de vacaciones?, ¿cuánto nos va a costar tenerlos en casa todo el día? Es bien sabido que este periodo demanda un mayor consumo en servicios del hogar como la energía eléctrica y el gas y, desde luego, un mayor consumo de alimentos, ya que el principal deporte que las vacaciones animan es el de ir y venir un sinfín de veces al refrigerador, abandonando el hábito de comer en un horario regular para inaugurar un horario de comida ad perpetuom.

Inicia la masacre, se eleva el gasto en alimentos, en servicios, en transporte, en recreo o uso de tiempo libre y en vacaciones cortas, esa es la tómbola de gastos a la que es sometido el hogar en esta temporada vacacional de verano. Y como sentencia el anuncio: “para los que quieren más”. Venimos enfrentando un rebote inflacionario en los últimos meses de casi 5%, que se robustece con este periodo de consumo caliente de gastos extraordinarios que terminan por promover una mayor inflación. La lucha de los padres de familia por resolver los gastos del hogar es interminable, nunca acaba.