Cada primer viernes de octubre se celebra el Día Mundial de la Sonrisa, una festividad que invita a las personas de todo el mundo a esparcir alegría y bondad a través de un simple gesto: sonreír.
El objetivo de este día es recordar que, aunque las sonrisas sean simples, tienen un impacto profundo en las personas.
Sonreír no solo mejora el estado de ánimo, sino que también tiene beneficios para la salud, como la reducción del estrés y la mejora del bienestar emocional.
En este día, se anima a la gente a realizar pequeños actos de bondad, desde ayudar a un desconocido hasta simplemente compartir una sonrisa.
La esencia de la celebración es que esos gestos amables pueden transformar el día de alguien y generar una cadena de positivismo en la comunidad.
Este Día Mundial de la Sonrisa, la invitación es clara: sonreír más, ser amable y contribuir a hacer del mundo un lugar más feliz.
SMILEY FACE Y EL DÍA DE LA SONRISA
La historia del “smiley face” (cara sonriente) comenzó en 1963 cuando el diseñador gráfico estadounidense Harvey Ballfue contratado por una compañía de seguros, State Mutual Life Assurance Company, para crear una imagen que ayudara a mejorar la moral de sus empleados. La tarea era sencilla: diseñar un símbolo alegre que promoviera un ambiente positivo en la empresa. En menos de 10 minutos, Ball dibujó un círculo amarillo con dos puntos negros y una sonrisa curva, que se convertiría en uno de los íconos más reconocidos del mundo.
La empresa produjo botones con el diseño, y se distribuyeron entre los empleados para fomentar el buen ánimo. El “smiley face” rápidamente se popularizó, extendiéndose más allá de la compañía y llegando al público general. Aunque Harvey Ball recibió solo 45 dólares por su creación y nunca patentó el diseño, la simple y efectiva imagen se convirtió en un fenómeno cultural.
Durante las décadas de 1970 y 1980, el “smiley face” se asoció con movimientos de paz y contracultura. Además, fue adoptado en campañas publicitarias y en la moda, aumentando su popularidad en todo el mundo.
El “smiley face” evolucionó aún más en la era digital, con la creación de los emojis en la década de 1990 y la famosa carita amarilla convirtiéndose en uno de los primeros símbolos utilizados en mensajería y redes sociales para expresar emociones.
Para asegurar que su mensaje original de positividad perdurara, en 1999 Harvey Ball instauró el Día Mundial de la Sonrisa, celebrado cada primer viernes de octubre. Su lema era simple: “Haz un acto de bondad. Ayuda a que alguien sonría”. La Fundación Mundial de la Sonrisa de Harvey Ball, creada tras su muerte en 2001, continúa promoviendo su legado.
BENEFICIOS DEL SONREIR
Mejora el estado de ánimo: Sonreír libera endorfinas y serotonina, hormonas que generan sensaciones de felicidad y bienestar, lo que puede ayudar a mejorar tu estado de ánimo de forma natural.
Reduce el estrés: Al sonreír, el cuerpo reduce la producción de cortisol, la hormona del estrés, lo que contribuye a relajarse y manejar mejor situaciones de tensión.
Fortalece el sistema inmunológico: Las emociones positivas, como las que genera una sonrisa, ayudan a mejorar la función inmunológica, lo que facilita que el cuerpo combata infecciones y enfermedades.
Promueve relaciones sociales: Una sonrisa es una señal de amabilidad y accesibilidad, lo que facilita la comunicación y genera un entorno más agradable, favoreciendo relaciones sociales y laborales.
Mejora la salud cardiovascular: Sonreír y reír ayudan a relajar el cuerpo, reduciendo la presión arterial y mejorando la salud del corazón a largo plazo.