Sin sorpresas. El Partido Morena confirmó lo que ya se sabía desde hace meses y este miércoles anunció a Claudia Sheinbaum como su virtual candidata a la Presidencia de México, una obvia imposición de Andrés Manuel López Obrador, quien, tras bambalinas, a la vieja usanza del PRI, fungió como “El Gran Elector”.

Alfonso Durazo, presidente del Consejo Nacional del partido oficial y gobernador de Sonora, dio a conocer que, en todas las encuestas realizadas, ganó por amplia ventaja la ex jefa de gobierno de la CDMX.

Como se esperaba, estuvieron presentes todas las “corcholatas” de López Obrador, menos Marcelo Ebrard , quien anticipó su salida de Morena, inconforme con los resultados, y declaró que no se someterá “a esa señora” .

Todos los aspirantes que se quedaron en el camino cumplieron escrupulosamente su cantado papel de levantarle la mano a Sheinbaum y legitimar su designación.

En medio de gritos aislados y fríos de “¡presidenta, presidenta!”, la coordinadora nacional de la defensa de la transformación -eufemismo de candidata- lanzó vivas a su mentor y jefe político, López Obrador, e hizo un tibio llamado a la unidad en Morena.

Sin referirse nunca por su nombre a Marcelo Ebrard, dijo que “aquí necesitamos de todos y todas… La unidad es fundamental y las puertas siempre están abiertas, nunca se van a cerrar”, lo que se interpretó como un llamado a negociar.

Claudia Sheinbaum se dijo “emocionada” -aunque más bien reflejaba preocupación- y afirmó que ganará las elecciones de 2024. “Hoy ganó la democracia, decidió el pueblo de México”, afirmó.

La ausencia de Ebrard fue elocuente. Horas antes había ofrecido una explosiva conferencia de prensa en la que acusó “irregularidades graves” en los sondeos efectuados por Morena. Incluso denunció violencia contra sus representantes.

Los resultados anunciados por Durazo fueron:

Claudia Sheinbaum: 39%

Marcelo Ebrard: 25.6%

Gerardo Fernández Noroña (PT): 12%

Adán Augusto López: 10%

Ricardo Monreal: 6%

Manuel Velasco (PVEM): 6%

¿UNIDOS POR LA TRANSFORMACIÓN?

Al fondo, el letrero rezaba con grandes letras: “Unidos por la Transformación”.

El espíritu de López Obrador se paseaba por el auditorio del hotel donde estaban concentrados: nadie lo veía, pero todos lo sentían.

La ausencia de Marcelo Ebrard hacía más ruido que los desangelados porristas de la ungida como candidata.

Todavía resonaban las burlas expresadas minutos antes por la candidata de la oposición, Xóchitl Gálvez, tras la ruptura en Morena:

“Marcelo aguanta, el pueblo se levanta”.

Y entonces, fieles al guion de Palacio Nacional, todos hablaron para cumplir con su papel de levantar la mano a la ganadora.

Ricardo Monreal dijo: “Todos nos necesitamos… No se debe actuar de forma facciosa… Que Claudia (Sheinbaum) cuente conmigo, la respeto, la reconozco, estaremos luchando donde ella esté…”.

Gerardo Fernández Noroña, la gran sorpresa -véase cómo rebasó y ridiculizó a Adán Augusto y a Monreal-, señaló: “(Marcelo) Ebrard aquí tiene su lugar… Pero quien rompa por ambición, se lo va a chupar la bruja políticamente hablando”.

Y Manuel Velasco anotó: “Desde que nos registramos, asumimos las reglas del proceso… Fue un proceso transparente, con cinco casas avaladas por su trayectoria… Los resultados son contundentes”.

Y punto.

Habemus candidata oficial.

Xóchitl ya tiene rival.

México tendrá Presidenta.

Periodista desde 1990. Ha sido reportero de Televisa Puebla, El Universal de Puebla, La Jornada de Oriente y Síntesis.

Fue coordinador editorial de El Universal de Tlaxcala y jefe de información de El Universal de Puebla.

Dirigió la revista Síntesis Policiaca, el área de noticias de Marconi Comunicaciones - donde condujo el noticiario matutino de “La Tropical Caliente” durante cuatro años- y el periódico El Heraldo de Puebla.

Desde 2001 ha publicado su columna “Garganta Profunda” en medios digitales, impresos y electrónicos.

Es director general del periódico digital Puebla Online y del periódico Crónica Puebla.

Trabajó durante 10 años en Televisa Puebla, donde condujo el noticiero nocturno -también el matutino y vespertino en distintas etapas- y fungió como gerente de Noticias por casi un lustro.

En 1990 recibió el Premio Nacional de Periodismo Juvenil, en 1991 el Premio Estatal de Periodismo de Puebla en el género de reportaje y en 1996 el Premio Estatal de Periodismo BUAP-Froylán Manjarrez.

Ha sido jurado del Premio Estatal de Periodismo del Estado de Tlaxcala.

Realizó estudios profesionales en la Escuela de Ciencias de la Comunicación de la UPAEP.