PAOLA ANGÓN, UN PELIGRO PARA EL PAN
Arturo Luna Silva
En dos sentidos, los dos muy graves, la administración de la panista Paola Angón representa un lastre y un retroceso.
Lo es, de manera evidente, para los habitantes de San Pedro Cholula, quienes depositaron una confianza que hoy su gobierno ha exhibido que fue inmerecida.
En un segundo tiempo, el desempeño de su ayuntamiento representa un grave riesgo hacia la construcción de una opción electoral viable en 2024 para la alianza opositora en Puebla.
Riesgo, lastre, obstáculo y estorbo, vaya cóctel.
La labor, desde el estricto punto de vista como funcionaria pública, de la alcaldesa representa -lo dicen fuentes de la coalición PRI-PAN-PRD- un “Talón de Aquiles” para la candidatura de Eduardo Rivera Pérez.
Uno en el que él no tiene control ni culpa.
Algo muy similar a lo que pasó en la elección extraordinaria de 2019, con Miguel Barbosa Huerta, como abanderado a la gubernatura, y Claudia Rivera Vivanco.
El peso del mal desempeño de Claudia Rivera como presidenta municipal resultó demoledor en los resultados finales en toda la zona conurbada.
Debido a ese auténtico tsunami, un candidato tan malo como Enrique Cárdenas pudo arrasar en toda esa franja casi sin hacer campaña.
Claudia Rivera puso en peligro el triunfo de Miguel Barbosa; hoy Paola Angón puede repetir la historia sólo que en agravio de Eduardo Rivera.
Y es que el de Angón es un gobierno desastroso, ignorante, autoritario y con ceguera.
Hay denuncias que tienen valor de prueba.
La pésima calificación de su administración es un hoyo negro para el PAN, en la zona metropolitana, hasta hoy con tendencia azul.
Vayamos a ejemplos muy puntuales.
En su reciente informe presumió que “estoy convencida que la infraestructura nos permite mejorar la movilidad, promover el desarrollo y generar el bienestar. Más que construir calles y vialidades, nosotros edificamos seguridad y esperanza”.
Pero la realidad -esa terca- es otra.
Los ciudadanos del municipio piensan muy distinto.
Como ejemplo está la relatoría puntual, para desmentirla, que hizo Daniel Aquino en X, antes Twitter.
Con fotografías y datos específicos sobre la falta de atención, calle por calle, derrumbó la presunción de la funcionaria.
También exhibió su falta de obras.
Desde su cuenta @_Analogico, fue puntual en su crítica.
Le recordó incluso peticiones que se hicieron por escrito, pero fueron ignoradas.
“Aquí algunos ejemplos cómo es que esas banquetas no tienen condiciones adecuadas para el tránsito seguro de todas las personas, al punto de que es frecuente ver a personas andar sobre el arroyo vehicular al no contar con banquetas seguras y accesibles”, posteó con varias imágenes.
Como ejemplo máximo del autoritarismo del gobierno de San Pedro Cholula está la aprehensión del reportero Juan Carlos Cacho, por hacer su trabajo de cobertura durante su informe.
Además de que la policía dispersó una manifestación con gas lacrimógeno.
Hasta el gobernador Sergio Salomón Céspedes Peregrina reprobó la actuación de los uniformados.
¿Cuál fue la respuesta de la alcaldesa?
¿Una disculpa? No.
¿Una aclaración? Menos.
Fue una amenaza.
“Si esto se sale de control y crece de manera arbitraria, entrará otra vez la ley”, advirtió a los periodistas que habían anunciado una manifestación por este caso.
El tema fue abordado con torpeza absoluta, sin tacto y hasta con beligerancia, por su director de Comunicación, Juan Carlos Oceguera.
Es un morenovallista anquilosado, sin experiencia ni oficio. Traumatizado, además, por sus escabrosas historias personales.
El día del informe, 14 de octubre, otros manifestantes fueron arrestados, cual delincuentes.
¿Dónde está su yerno, el diputado local Eduardo Alcántara, quien además es su principal asesor?
El político panista que está señalado por violencia política y agresiones de índole sexual es también responsable del caos.
A la falta de obras, atención a ciudadanos, resultados en seguridad pública y un mínimo de experiencia y sentido común, hay que añadir los visos de ingobernabilidad.
Un ejemplo: la Policía Municipal del gobierno de Angón ha acumulado 23 denuncias por violaciones a derechos humanos de ciudadanos y ciudadanas.
Detenciones arbitrarias, uso excesivo de la fuerza y agresiones a civiles son las principales causas.
La policía ha agredido sistemáticamente a los habitantes de San Pedro.
Hay desgobierno.
Hay corrupción.
Hay colusión.
Es una tierra baldía sin ley.
Con esa aliada deberá lidiar Eduardo Rivera en la gesta electoral más complicada de su vida y posiblemente también de la alianza, en lo que respecta a los 9 estados con elección de gubernatura.
Sí, qué pesada piedra es la administración de Paola Angón.