El aguinaldo es un derecho de las y los trabajadores, quienes por ley reciben por lo menos 15 días de salario, es fundamental ser conscientes del esfuerzo y dedicación que conlleva obtener este beneficio a finales de año; levantarse temprano para ir a trabajar, enfrentar el tráfico y/o transportarse para trasladarse, asumir nuevos retos laborales y buscar un equilibrio entre el trabajo, la vida familiar y social.
En la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (CONDUSEF), reconocemos el esfuerzo que las y los trabajadores desempeñan durante todo el año para recibir este beneficio y promovemos la generación de conciencia para que cada peso que se recibe del aguinaldo sea cuidado y valorado, no gastarlo de forma inteligente es un gran error.
“Gasta cada peso pensando en el esfuerzo que te tomó obtenerlo”.
Es momento de ser conscientes de que las fechas en las que se recibe el aguinaldo están llenas de emociones, y una buena forma de evitar hacer compras impulsivas es desvinculando la emoción, de la temporada navideña, cuidemos de no caer en este error, ni en las estrategias mercadológicas.
¿En qué utilizar el aguinaldo?
- Pago de deudas.
Se recomienda incluir las deudas que generan mayores intereses. Al reducirlas se mejorará la salud financiera y, por lo tanto, las personas viven con menos estrés financiero.
- Recompensa el esfuerzo.
Si se planea comprar algún producto o servicio en estas fechas, es importante cuidar que sea algo que se ocupará personalmente o para la familia y que permita el crecimiento del patrimonio, de esta forma se puede disfrutar al máximo y por más tiempo.
- Ahorro o Inversión como medida preventiva.
Haz un esfuerzo por ahorrar entre un 5 a un 10% del aguinaldo, cuidando siempre que sea en una cuenta que genere rendimientos, este puede ser un excelente momento para invertir y CETESDIRECTO es una opción que el Gobierno Federal acerca a la población.
Con estas medidas podrás evitar la famosa “cuesta de enero”.