La propuesta de reforma a la Constitución en materia electoral de López Obrador pretende sustituir al Instituto Nacional Electoral (INE) por el Instituto Nacional de Elecciones y Consulta (INEC), que reduce de 11 a siete el número de los consejeros que serán electos por voto popular. El proyecto también elimina a los diputados plurinominales y reduce el financiamiento público sólo al periodo de campañas.
La iniciativa presidencial, que quiere reformar 18 artículos de la Constitución y siete artículos transitorios, propone desaparecer los 32 Organismos Públicos Locales Electorales (OPLEs), creados en la reforma de 2014, para “acabar con duplicidades”, y también reduce el número de legisladores locales y regidores en los municipios.
Los congresos locales tendrían ahora un mínimo de 15 y un máximo de 45 integrantes, mientras que los regidores de los ayuntamientos también decrecerían.
A diferencia del INE, que tiene 11 consejeros elegidos en consenso por el Congreso, el nuevo instituto electoral estaría conformado por siete integrantes que deben elegirse por voto popular entre una lista de 60 candidatos presentados por los Poderes Ejecutivo, Legislativo y Judicial.
Con el propósito de erradicar los fraudes electorales y de fortalecer la democracia, así como de ahorrar 24 mil millones de pesos, la iniciativa de reforma electoral que el Ejecutivo enviará a la Cámara de Diputados reduce de 500 a 300 los diputados federales y de 128 a 96 los senadores, incorpora a la Constitución el voto electrónico, y deja fuera de los tiempos en radio y televisión a los organismos electorales.