Encomendándose a Nuestra Señora de Ocotlán, la Arquidiócesis de Puebla se unió a las diócesis de Tlaxcala, Tehuacán y Huajuapan para pedir por el fin de la pandemia en un octavario, el cual inició este domingo y concluirá el siguiente domingo.

“El segundo domingo de julio celebraremos la fiesta de Nuestra Señora de Ocotlán, patrona de Puebla, de Tlaxcala, de nuestra Provincia Eclesiástica Angelopolitana, formada por las diócesis de Tlaxcala, Tehuacán, Huajuapan de León, Oaxaca, y Puebla”, informó el arzobispo de Puebla.

En misa dominical, el arzobispo de Puebla, Víctor Sánchez Espinosa invitó a los miembros de todas las diócesis para orar por la intervención de la Señora de Ocotlán para la sanación de los enfermos de COVID-19 y el fin de la pandemia que tanto mal ha generado en toda la población.

“Madre nuestra de Ocotlán te pedimos que vuelvas tus ojos misericordiosos, que nos pongan en los huecos de tus manos, que alcances la salud de nuestros hermanos enfermos e intercedas por el fin de esta pandemia, que tanto dolor y sufrimiento ha causado”, pidió.

Monseñor resaltó que los estragos de la pandemia son devastadores, debido a que se han registrado pérdidas irreparables de seres queridos, médicos desgastados y en riesgo, al poner en peligro su vida para apoyar a sus hermanos, pérdida de trabajo, aumento de la pobreza, miedo e incertidumbre del futuro, ante la situación adversa.

El líder de la grey exhortó a que todos los católicos permanezcan en casa y quien tenga que salir por necesidad de trabajo siga todas las recomendaciones emitidas por las autoridades sanitarias para evitar más contagios de coronavirus.