Desde el año 2015 y hasta el primer trimestre del año en curso se han denunciado un total de 40 casos de aborto en la entidad poblana, siendo el año de 2016 cuando se abrieron más carpetas de investigación por este delito con un total de 13.

Lo anterior de acuerdo con cifras del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP), las cuales demuestra que en el primer trimestre del año en curso se dieron dos denuncias de esta índole, una baja del 50 por ciento en comparación con los cuatro casos que se dieron en ese mismo tiempo pero del 2019.

El gobernador de Puebla, Miguel Barbosa Huerta, anunció este lunes que al menos cinco mujeres que están en prisión por homicidio por causas de parentesco que es cuando se les señaló como responsables de perder el producto de un embarazo después de los tres meses, podrían ser preliberadas bajo la figura de “indulto”.

De acuerdo con el SESNSP, en el año 2015 el número de carpetas de investigación fue de siete, en 2016 se dio la cifra más alta de los últimos seis años con 13 casos, en 2017 se denunciaron nueve abortos, en 2018 fueron cinco casos y en 2019 se dio la cifra más baja con cuatro carpetas.

Cabe destacar que para la Secretaría de Salud cualquier interrupción del embarazo antes de las 21 semanas de gestación, es considerada como un aborto. Sin embargo, el Código Penal del Estado de Puebla desecha este criterio y lo define como “la muerte del producto de la concepción en cualquier momento de la preñez”.

Los abortos son considerados como un delito en la entidad, salvo que se presenten bajo cuatro circunstancias específicas: Cuando sea causado solo por imprudencia de la mujer embarazada, cuando el embarazo sea el resultado de una violación.

Cuando la mujer embarazada corra peligro de muerte a juicio del médico que la asiste y oyendo el dictamen de otro médico y cuando se deba a causas “eugenésicas” (enfermedades o deficiencias congénitas) graves.