Los feminicidios parecen imparables, cuando más de 500% ha crecido el número de víctimas en Puebla en los últimos cinco años. De acuerdo con cifras oficiales, en 2015 se reportaron nueve mujeres asesinadas por cuestión de género, en 2019 los números se cerraron con 59 casos.

Si bien 2019 ha sido el de mayor incidencia, los datos históricos del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP), demuestran cómo el fenómeno ha marcado una tendencia al alza.

En 2015 se reportaron nueve víctimas, en 2016 la cifra se elevó a 12, en 2017 creció a 27 mujeres asesinadas. En 2018 los datos cerraron con 32 víctimas y 2019 terminó con 59. Para este 2020 el panorama no luce distinto, pues comenzó con siete casos, apenas uno menos que en enero de 2019.

Un dato que resulta por demás preocupante es el de las menores de edad, pues de 2015 a enero de 2020 han matado a 14, pero seis (42%) de los casos ocurrieron el año pasado. En este primer mes de 2020 han sido dos las asesinadas, cantidad que de por sí ya supera la cantidad de adolescentes y niñas ultimadas en 2016 y 2017 e iguala al 2015.

Asimismo, destaca el empleo de armas blancas por encima de las de fuego empleadas por el victimario. Según el SESNSP, en el 34% el feminicida empleó algún arma blanca; el 24% fue un arma de fuego. En la mayoría de las ocasiones (41%), el homicida recurre a otros elementos.