Seguirán los incrementos de los productos de la canasta básica hasta el siguiente año, esto debido a que a pesar de la lenta recuperación económica que se está dando, el poder adquisitivo de las familias sigue estancado por la inflación de los insumos.

Marcos Gutiérrez Barrón, investigador de la Facultad de Economía de la Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla (Upaep), explicó que la inflación en Puebla ya alcanzó el 4.5 por ciento, por lo que las familias se encuentran perdiendo poder adquisitivo y lo del aumento del salario mínimo ya fue superado.

“En el país, la inflación anualizada es de 6.1 por ciento; y para Puebla es de 4.5 por ciento. Entonces, la pérdida del poder adquisitivo es el mismo que el de la inflación. Mientras se presenta un incremento a la inflación, el salario se queda más degradado y pierde su poder adquisitivo”, apuntó.

Resaltó que uno de los problemas principales que se ven dentro de la economía poblana es la cadena de suministros en varios sectores, como el desabasto de chips en la industria automotriz, puesto que demuestra que la economía del estado sigue siendo frágil.

“Los problemas en el abasto de los chips han afectado la producción en otros sectores. Esto ha hecho que la economía poblana presente un menor dinamismo. La economía poblana sigue siendo frágil y mientras no se solucione el problema de abasto, no veremos ese crecimiento más allá de la media nacional”, acotó.