Por ser víctimas de violación interrumpieron el embarazo de 14 menores en hospitales a cargo de la Secretaría de Salud del Estado de Puebla (SSEP), durante los últimos tres años. La principal característica de las afectadas fue que se trataron de adolescentes de entre 13 y 15 años.

La Unidad de Transparencia de la SSEP informó en una solicitud de acceso a la información pública que entre el 2018 y el primer semestre de este año 10 de las 14 mujeres apoyadas tuvieron entre 13 y 15 años, lo que representó ser más del 71 por ciento de las víctimas.

Según la Norma Oficial Mexicana NOM-046-SSA2-2005, para atender la Violencia Familiar, Sexual y contra las Mujeres, detalla que “en caso de embarazo por violación, las instituciones públicas prestadoras de servicios de atención médica deberán prestar servicios de interrupción voluntaria del embarazo”.

Bajo ese criterio las poblanas víctimas de las agresiones que interrumpieron su embarazo la mayoría lo hicieron en el Hospital de la Mujer de Puebla, con 10 de los 14 casos; seguido por los nosocomios General de Zacatlán que acumularon dos pacientes menores intervenidas.

También resalta que la mayoría de los procedimientos utilizados para la interrupción del embarazo fue mediante la Aspiración Manual Endouterina (AMEU), mezclado con medicamentos, aplicado en siete de las pacientes; además, resalta que a otras cuatro mujeres les suministraron misoprostol.