ESPN informa que el Barcelona jugó su primer Joan Gamper sin Leo Messi frente a la misma Juventus que hace 17 años, en 2005, fue espectadora de excepción de su explosión en el mismo torneo. El futbolista, monumental, a través del que se escribió el relato del mejor Barça de la historia estuvo presente en el estadio Johan Cruyff a través de parlamentos, ovaciones, gritos y recuerdos. Su huella se dejó notar de manera tan indiscutible como alarmante. Su ausencia, ya definitiva, marcó la presentación de un equipo, ahora ya sí, nuevo, diferente y huérfano. Tanto como se aventura el futuro inmediato.

Ganó el 'nuevo' Barça por 3-0 a una Juve que pareció aún menos rodada que el equipo azulgrana. Salpicada ya de entrada por un error obsceno, una pérdida en su mediocampo sin apenas defensas por detrás, que permitió a Memphis anotar el 1-0, la escuadra italiana se convirtió en cierta manera como la mejor aliada de los jugadores locales, que evitaron, al menos en esta noche de pretemporada, el señalamiento popular.

"Gracias Leo por todo lo que has hecho por el Barça", le despidió Busquets, nuevo capitán, en su inicial discurso, despertando la ovación de una afición que no olvidó en toda la jornada al ídolo desaparecido. No estuvo Messi pero su figura sobrevoló el estadio Johan Cruyff, convirtiendo el partido en un trámite sin más.

Pocas conclusiones pudieron sacarse del partido. Si acaso confirmar que la calidad y prestancia de Yusuf Demir, asistente a Memphis en el 1-0 y que completó 62 minutos más que notables, le ha ganado el corazón a Koeman y que no solo le ha pasado por delante a Riqui Puig, sino que puede ser un jugador muy a tener en cuenta.

Y eso que el canterano, siempre apoyado por la hinchada, cerró la noche con un gol excelente para darse a notar y por más que el entrenador ya le haya dejado patente la poca confianza que tiene en él.

Más la tiene Koeman en Griezmann, ahora ya sin disimulo obligado a tomar el papel protagonista y esperar tres semanas para comprobar si los pitos que ya recibieron durante la presentación Umtiti, Coutinho y Pjanic les van convenciendo de buscarse una salida. El defensa francés, que jugó la última media hora, lo sufrió por duplicado...

No fue la Juventus, para nada, un rival temible como el último que pasó como un ciclón por el Camp Nou bajo el embrujo de Cristiano Ronaldo. El portugués, menos pitado de lo que cabría suponer por el público local, pasó de puntillas por el partido tal como Morata, Ramsey o Cuadrado.

Más amistoso que nunca, el partido no tuvo ni un ápice de polémica o dureza y en cuanto un cabezazo, tan magnífico como incomprensible por su comodidad, de Braithwaite sirvió para colocar el 2-0 definitivo se acabó cualquier conato de duda.

Ganó el Barça sin más. Y sin Messi. Su nombre se escuchó y se repitió en no pocas ocasiones en un ambiente más de conformismo que protesta. Habrá que ver, sin embargo, la reacción de la hinchada, más habitual, en el Camp Nou.