Marca dio a conocer que el US Open vivió una situación absolutamente surrealista e histórica, que acaba con la descalificación de Novak Djokovic. El tenista serbio, número uno del ranking ATP y gran favorito al triunfo en el torneo, se vio obligado a abandonar su partido de octavos de final ante Pablo Carreño, después de dar un pelotazo –de forma aparentemente involuntaria- en el rostro de una de las jueces de línea del partido. Después de minutos de discusiones, el juez árbitro del torneo comunicó a Djokovic la decisión de su eliminación fulgurante por este motivo. Pablo Carreño avanza a cuartos de final y continúa como único español en el cuadro.

La circunstancia no se podía esperar, pero Djokovic mostraba atisbos de frustración en un encuentro en el que no daba con la tecla para superar a un correoso Carreño. No había acabado el primer set cuando sucedió el desagradable hecho. Pablo rompía el saque de Nole, colocándose con 6-5 y saque a favor y el serbio, que ya había lanzado un pelotazo agresivo, despidió con su raqueta la pelota que le sobraba con considerable fuerza hacia la parte trasera de la pista, en la que se encontraba la juez de línea.

La pelota golpeó en la tráquea de la juez, que rápidamente se echó al suelo con ostensibles gestos de dolor. Djokovic, de forma inmediata, pidió disculpas al ver el contacto de la pelota con la auxiliar, e incluso se acercó a comprobar su estado de salud. Este gesto honra al serbio, pero no le iba a apartar de la descalificación. Con la norma en la mano, el acto de Novak se considera descalificante y así se lo explicaron los jueces del torneo al número uno del mundo, quien tras minutos de discusión e incredulidad dio la mano a Carreño y se despidió del US Open.