Hace algunos meses se rumoreaba sobre la existencia de un supuesto Surface Phone, un teléfono que tendría todo el poder de una Surface, y que podría revivir a Windows Phone. Sin embargo, ya sabemos cómo acabó la historia, pues Microsoft terminó por matar su sistema operativo móvil, y enfocarse más en otros servicios en la Nube, pero una nueva filtración revela que la Surface de bolsillo existe, y podría ser presentada en un futuro próximo.
La Surface de bolsillo es uno de los proyectos de hardware más ambiciosos de la compañía, de Redmond y como su nombre lo indica, no buscan revivir o lanzar un nuevo competidor para Android y iOS, sino que quieren llevar todo el poder de Windows 10 en una computadora que también se puede convertir en tablet y teléfono, esto gracias a su pantalla plegable o flexible.
Las pantallas flexibles son el futuro de la industria tecnológica, LG, Samsung y Sharp son las empresas que parecen tener avances prometedores en este campo, y se espera que a finales de este año, o en enero de 2019 conozcamos el primer teléfono con pantalla flexible de Samsung, conocido como Galaxy X, razón por la que Microsoft también quiere ser de las primeras marcas en ofrecer productos tecnológicos con pantallas flexibles.
Según las imágenes filtradas gracias a correos electrónicos de la compañía, la Surface con pantalla flexible podrá doblarse a la mitad para convertirse en una computadora, es decir, una mitad de la pantalla se convertirá en un teclado totalmente táctil. Por otra parte, si desdoblamos la pantalla, tendremos una tablet, y si la flexionamos completamente (a 360 grados), tendremos un teléfono con doble pantalla.
No se sabe exactamente cómo será el funcionamiento de cada uno de los modos, pero actualmente Microsoft tiene un modo tablet para computadoras cuyas pantallas pueden girar en 360 grados.
El proyecto parece estar en fase de desarrollo, y las imágenes muestran renders o prototipos de cómo sería esta Surface, por lo que no debemos esperar que sea presentada este año, pero hay probabilidades de que sí llegue en 2019, todo depende de cómo evolucione el proyecto y la tecnología.
El proyecto actualmente es conocido como Andrómeda, y fuentes familiarizadas con dicho trabajo han mencionado anteriormente que la empresa podría desechar todo el avance de la noche a la mañana, pues no sería la primera vez que se trabaja en una Surface con características similares.
Asimismo, parece que Intel también está trabajando de cerca con Microsoft para crear componentes que puedan aprovechar esta nueva tecnología, por lo que no debería de sorprendernos que en caso de que Andrómeda se convierta en una realidad, marque el futuro de la industria de las computadoras personales.
