El PRI en la Cámara de Diputados cerró filas en torno al presidente Enrique Peña Nieto y sostuvo que la liberación del precio de la gasolina no variará, toda vez que la medida que dio pie al llamado gasolinazo, era inevitable.

El coordinador de los diputados del PRI, César Camacho Quiroz, fijó la postura de su bancada a través de un pronunciamiento, en el que sostuvo que se gastan cerca de 200 mil millones de pesos al año para mantener un precio artificial de la gasolina, situación que de sostenerse un año más, habría requerido elevar impuestos, aumentar la deuda externa o la desaparición de programas sociales como Prospera o eliminar las campañas de vacunación.

“No habría cómo sufragar la pensión para adultos mayores, el Seguro Popular, los apoyos económicos a productores agrícolas o tampoco habría recursos para construir carreteras, dar mantenimiento a caminos”.

Recortar el gasto público para seguir subsidiando la gasolina, equivaldría al doble del presupuesto de la Secretaría de Desarrollo Social, a la mitad del presupuesto anual del Instituto Mexicano del Seguro Social, por lo que el gasolinazo “resultaba inevitable”.

El diputado Camacho Quiroz no aceptó preguntas, insistió en que la decisión del gobierno federal de adelantar la apertura del mercado de gasolina y elevar su costo, permite preservar la estabilidad del país, no sólo la macroeconomía, sino que al final impacta en los bolsillos de los mexicanos.

Por ello “quienes militamos en el PRI e integramos el Congreso, asumimos con responsabilidad esta medida y expresamos nuestra completa solidaridad con el presidente Enrique Peña Nieto”.

El legislador priísta agregó que se hacen cargo de las expresiones de descontento, que no sólo son entendibles sino respetadas, pero no permitirán acciones violentas e ilegales que al final perjudican a todos los consumidores.

Sostuvo que presentarán en breve propuestas de corto plazo, entre ellas la comparecencia de los secretarios de Hacienda y Energía, así como del director de Pemex, del Procurador Federal del Consumidor y del titular de la Comisión Reguladora de Energía, a fin de intercambiar opiniones

Otros legisladores del PRI tampoco quisieron hablar. El senador Aarón Irizar dijo no haber leído la carta que su compañero de bancada, el senador Patricio Martínez, envió al dirigente del PRI, Enrique Ochoa, en la que le pide revertir el gasolinazo y escuchar a los ciudadanos que en todo el país han expresado su descontento por la medida.

Fuente: http://www.jornada.unam.mx/