En Puebla, en los últimos seis años, sólo el 16.66 por ciento de los procesos iniciados por delito de aborto terminaron en sentencias, lo que significa que de los 18 procesos que presentaron, solo tres tuvieron una condena.

De acuerdo con la solicitud de información con folio 1190/2017, en el año 2011 fueron presentadas dos procesos iniciados, de los cuales sólo uno terminó en condena. Al año siguiente fueron tres el número de averiguaciones que se dieron por este "crimen", mientras que solo uno concluyó en sentencia.

En el año 2013 el número de procesos comenzados fue de cuatro, siendo que solo uno derivó en condena, el 2014 también tuvo cuatro investigaciones convirtiéndolo en el segundo año consecutivo con la cifra más alta en seis años, sin embargo ese año tuvo sentencias.

En el 2015 el número disminuyó a tres, pero ninguno fue condenado y en el año que concluyó fueron dos las averiguaciones por el delito de aborto y de igual manera ninguno derivó en una sentencia dictada.

De acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) en el estado entre el año  2010 y 2013, 54 mil 840 mujeres pasaron por la experiencia un aborto en algún hospital de Puebla.

Cabe destacar que para  la Secretaría de Salud cualquier interrupción del embarazo antes de las 21 semanas de gestación, es considerada como un aborto. Sin embargo, el Código Penal del Estado de Puebla desecha este criterio y lo define como “la muerte del producto de la concepción en cualquier momento de la preñez”.

Los abortos son considerados como un delito en la entidad, salvo que se presenten bajo cuatro circunstancias específicas: Cuando sea causado solo por imprudencia de la mujer embarazada, cuando el embarazo sea el resultado de una violación.

Cuando la mujer embarazada corra peligro de muerte a juicio del médico que la asiste y oyendo el dictamen de otro médico y cuando se deba a causas “eugenésicas” (enfermedades o deficiencias congénitas) graves.