El índice de violencia al seno de la familia ha tenido un repunte del 97 por ciento en Puebla en los últimos siete años, según el reporte de la Fiscalía General del Estado (FGE) correspondiente al informe de labores 2016.
El año pasado acumuló la mayor cantidad de incidencias, más de 5 mil 500. En 2015 la situación no fue muy diferente, pues se reportaron poco más de 5 mil casos, lo que representó un aumento del 12 por ciento respecto de 2014.
Sin embargo, el salto más destacado se registró de 2010 a 2011, al pasar de 2 mil 800 a 3 mil 900 casos, más del 41 por ciento de incremento.
La FGE reconoce en el informe la urgencia por reducir este fenómeno: “el caso de la violencia familiar es otro de los retos en términos de política pública. Su comportamiento nos produce enorme insatisfacción y nos alienta a redoblar esfuerzos como los emprendidos por los Centros de Justicia para la Mujeres”.
Es preciso señalar que hasta la segunda semana de enero, el Boletín del Sistema de Vigilancia Epidemiológica reportó 15 casos de atención en salud pública por casos de violencia Intrafamiliar, en 10 las afectadas eran mujeres.