Ante el aumento en el precio de las gasolinas Magna, Premium y el Diesel, se ha creído erróneamente que los empresarios gasolineros se ven beneficiados con altas ganancia. Nada más falso que eso.
La empresa SERVICAR aclara que:
1. Los precios de las gasolinas los establece la SHCP, por lo que las estaciones de servicio y quienes somos dueños de las mismas no tenemos ni voz ni voto al respecto. Tras la liberación de los precios de las gasolinas, a nosotros nunca se nos preguntó nuestra opinión, cuando menos no a la mayoría.
2. El cálculo de precios de la gasolina en México es algo complejo y su liberación fue inoportuna, ya que se hizo cuando el peso se ha devaluado más de 20% frente al dólar y a sabiendas de que no existe la infraestructura necesaria en ductos y terminales de almacenamiento.
3. Para resolver dichas carencias, las autoridades licitarán y arrendarán a terceros hasta el 30% de los ductos y terminales que actualmente son de uso exclusivo de Pemex, siendo que en la actualidad estos no alcanzan para satisfacer la demanda, presentándose continuamente grandes periodos de desabasto en muchas regiones del país.
4. Con los nuevos precios de los combustibles, el gobierno también afectó y disminuyó la comisión de los gasolineros, que siendo nivel Cualli tenían hasta el 2016 un margen del 6.5% sobre el precio de venta al público y que ahora tendrán una cifra fija equivalente a solo el 5.76%. En otros países, el margen para la gasolinera llega a superar el 10%. Por otro lado, el diferencial de $.12 centavos por litro, representa unos 6,000 mil millones de pesos anualmente y desde luego se lo embolsará el gobierno federal.
5. De los nuevos precios que se pagan, sobre un 45% se va a IEPS e IVA y aun cuando se baje el primero, es decir el IEPS, los gasolineros en nada se beneficiarán, pero si el gobierno federal que este año va a recaudar al menos $250,000 millones de pesos por estos impuestos en combustibles automotrices, cifra que representa más del 10% de todos los impuestos previstos a cobrar en 2017.
6. Otra grave ineficiencia que arrastra la liberación de precios del combustible, es la ineptitud para erradicar el robo de gasolina a los ductos de Pemex y que desde luego es un riesgo que las empresas privadas extranjeras o nacionales, no quieren correr y por tanto inhibe la inversión.
7. Con la liberación de precios de las gasolinas, vigente desde el 1 de enero pasado, un alza en el precio internacional del crudo podría dar un golpe aún más duro a los bolsillos de los mexicanos.
8. El desequilibrio entre oferta y demanda y los recortes de producción, los conflictos geopolíticos, el terrorismo, cuestiones meteorológicas, ataques especulativos en los mercados financieros, tendrán un impacto en el Precio Internacional del Petróleo (WTI) y en 2017 podría suceder que llegue alcanzar su máximo histórico, sobre 145 dólares el barril.
9. Con eso y dada la liberación del precio de la gasolina, el litro de Magna por ejemplo, se podría llegar a vender en México hasta en $50.00 pesos y el de Premium alrededor de $56.00 pesos por litro, lo cual simplemente sería devastador para el país.