Como un eje transversal de su plan de trabajo, la Facultad de Medicina Veterinaria y Zootecnia de la BUAP desarrolla el Proyecto de Eco-eficiencia, en el cual se proponen diversas acciones para el manejo adecuado y cuidado de los recursos naturales. “Se trata de un compromiso que se pretende poner en marcha a favor de la sustentabilidad”, afirmó su director, Óscar Agustín Villarreal Espino Barros.
En colaboración con la Facultad de Ciencias de la Electrónica (FCE) y Fundación BUAP, la Facultad de Medicina Veterinaria y Zootecnia instalará una pasteurizadora solar para reducir la presencia de agentes patógenos en mil 400 litros de leche producidos cada día en las instalaciones de la posta zootécnica, zona donde se ubican los módulos de laboratorios. Lo anterior, permitirá pasteurizar la leche y venderla a un precio más bajo, además de darle un valor agregado al producto.
Igualmente, esa unidad académica ubicada en el municipio de Tecamachalco construirá un biodigestor para transformar una tonelada de estiércol en biogás, combustible que servirá para sustituir la energía eléctrica en la operación de la sala de ordeña del módulo de bovinos, en el taller de lácteos y para la pasteurizadora. En el desarrollo de este sistema colabora la FCE y Fundación BUAP.
Por otra parte, está en marcha un proyecto para la captación de agua de lluvia. Esta obra -en colaboración con el Centro Universitario para la Prevención de Desastres Regionales (Cupreder)- permitirá abatir la escasez de agua en las instalaciones de la facultad y en la posta zootécnica, donde únicamente hay un pozo para obtener entre tres y cuatro pulgadas de agua por segundo, indicó Villarreal Espino Barros. Con ello, se tendrá una reserva extra de este líquido para la alimentación de los animales y la producción de forrajes, como ensilaje de maíz, alfalfa y avena.
Aunado a ello, señaló, se tiene un proyecto de reforestación alrededor de la posta zootécnica, con especies nativas de mezquite, un árbol que aporta múltiples beneficios sociales y económicos a los habitantes de las zonas áridas y semiáridas.
Otra de las estrategias para el uso eficiente de este líquido es la instalación de biofiltros para la reutilización de aguas grises de los lavamanos, las cuales servirán para el riego de áreas verdes. Una propuesta más es el cambio de los mingitorios actuales por otros con funcionamiento en seco y las tasas de baño de 12 litros por ahorradoras de 4.8 litros, además de llaves automáticas.
También, comentó el director de la Facultad de Medicina Veterinaria y Zootecnia, se establecerá un centro de acopio de residuos para su correcta separación, a la par de generar un programa sobre educación ambiental. Asimismo, se tendrán oficinas verdes en el área administrativa, con reciclaje de papel y manejo electrónico de documentos.
Con estas acciones, se busca la sustentabilidad de la facultad a corto y largo plazo, porque esta unidad académica está comprometida con la producción de alimentos inocuos y el cuidado del medio ambiente, aseguró Villarreal Espino Barros.