Dada la complejidad del mundo actual y las necesidades emergentes de la población, hoy las ciencias sociales revisten un papel preponderante para el desarrollo, pues las humanidades se reafirman como elemento integrador del pensamiento, subrayó el rector Alfonso Esparza Ortiz durante la ceremonia conmemorativa del 25 aniversario del Instituto de Ciencias Sociales y Humanidades “Alfonso Vélez Pliego” de la BUAP (ICSyH), donde extendió un reconocimiento a la calidad de sus programas educativos y su sólida planta académica.
En su intervención, Francisco Vélez Pliego, director del ICSyH, externó su agradecimiento al Rector Alfonso Esparza Ortiz, en quien reconoció a “un rector que sin cortapisas ha apoyado el desarrollo de esta unidad académica”. Igualmente, expresó su respaldo a la petición de que cesen los recortes presupuestales para la educación.
Al respecto, afirmó: “Permítame expresarle mi apoyo solidario a la gestión que usted realiza… Ha sido el único rector que sin cortapisas ha apoyado el desarrollo de esta unidad académica, misma que en otros rectorados padeció persecución”.
En el Paraninfo del Edificio Carolino, donde concurrieron estudiantes, académicos e investigadores de ese instituto, el Rector de la BUAP señaló que la educación es la herramienta para incidir en el desarrollo y contribuir a la solución de problemas sociales, por lo cual es esencial que los poderes ejecutivo y legislativo confluyan en la determinación de invertir mayores recursos y eviten futuros recortes a ese rubro.
En ese recinto universitario, aseveró: “Necesitamos las ciencias sociales para estudiar al hombre como ser social por medio de métodos científicos y explicar la complejidad de nuestra realidad; y necesitamos a las humanidades para desarrollar un pensamiento crítico que sea útil para comprender y aprovechar las diversas expresiones del comportamiento humano”.
Se trata, abundó, de disciplinas de las que surgen importantes contribuciones al desarrollo, tanto mediante la formación de capital humano, como a través del trabajo científico.
Por ello, felicitó a los cien profesores investigadores del ICSyH -cuyo proyecto fundacional fue suscrito por 57 académicos que desarrollaban sus actividades en distintas escuelas, en el Instituto de Ciencias y en la entonces Secretaría de Investigación y Estudios de Posgrado- “por su alto desempeño y la calidad de su trabajo, a los integrantes de los ocho cuerpos académicos consolidados y los cuatro en consolidación, a los miembros del Sistema Nacional de Investigadores y a los docentes con perfil Prodep”.
Esparza Ortiz destacó que dicho instituto cuenta con una sólida infraestructura académica, tanto en planta física, como en equipos y acervos, tal es el caso de la Unidad de Información Bibliohemerográfica y Documental, así como la biblio-hemeroteca “Ernesto de la Torre Villar”, la más completa y especializada en ciencias sociales y humanidades, con cerca de 100 mil volúmenes y 150 mil ejemplares de revistas y fondos documentales.
A esa comunidad universitaria le adelantó que en este año concluirán los trabajos de restauración de la Casa de las Culturas Contemporáneas -anterior Casa del Arco- y el ex convento de las Clarisas, el cual será sede de la Casa del Libro “Gilberto Bosques Saldívar”.
Por otra parte, Francisco Vélez Pliego refirió que el instituto ha continuado en la estrategia de fortalecimiento de su planta académica. En la actualidad, el 91.7 por ciento de sus profesores tiene estudios de posgrado, de ellos el 78.3 por ciento grado de doctor y el 13.4 por ciento de maestría. Asimismo, el 52 por ciento pertenece al Sistema Nacional de Investigadores.
Esta fortaleza de la planta académica, dijo, nos ha permitido formular nuevos proyectos de posgrado, como los programas multidisciplinarios en estudios socioterritoriales, en revisión por parte del Consejo de Investigación y Estudios de Posgrado; además de actualizar los programas vigentes, entre ellos un nuevo doctorado en Historia.
A 25 años de su fundación, el Instituto de Ciencias Sociales y Humanidades está enfrentando los retos de su propio crecimiento académico, de las circunstancias que le plantea el relevo generacional de su planta docente y las adversidades que el propio entorno impone a las instituciones de educación superior de carácter público.
Vélez Pliego indicó que la comunidad de esta unidad académica está consciente de que los retos que impone un crecimiento económico marginal del país, sustentado en políticas monetaristas y de mercado, conducen a una mayor polarización y desigualdad en México.
En este contexto, las políticas de financiamiento a la educación superior de carácter público y al desarrollo de la investigación científica, tecnológica y humanística se aleja de los compromisos asumidos inicialmente por el gobierno federal: destinar recursos suficientes a estas actividades, concluyó Vélez Pliego.