La calidad académica es una constante en las ocupaciones de la actual administración central de la BUAP. Como muestra del compromiso con la excelencia, se llevan a cabo estrategias para apoyar la vocación científica y el desarrollo de proyectos en beneficio de la sociedad y el país, aseguró el rector Alfonso Esparza Ortiz, tras presidir el Segundo Informe de Labores de Eduardo Monjaraz Guzmán, al frente del Instituto de Fisiología.
“Al efectuar ahorros en otras áreas y destinar estos recursos a la investigación, se demuestra que en la BUAP se impulsa el quehacer científico y se realizan inversiones para que los académicos dispongan de los elementos necesarios en el desempeño de sus labores. Un ejemplo de ello, será el Eco Campus Universitario Valsequillo, espacio que promoverá la participación colegida entre pares académicos, de manera inter y multidisciplinaria”, precisó.
Ante el Consejo de Unidad Académica, el rector Alfonso Esparza resaltó el alto grado de visibilidad que tiene el Instituto de Fisiología, a través de la colaboración con diversas universidades para consolidar el Laboratorio Nacional de Canalopatías, el primero en su tipo en Latinoamérica. Además, la participación de su personal en las caravanas de salud, como parte de sus actividades de responsabilidad social.
En esa comunidad, recordó que se han realizado esfuerzos para otorgar promociones y definitividades en beneficio de académicos y administrativos. También se mejoraron las condiciones laborales de los técnicos académicos y se renovó la infraestructura de los laboratorios, para consolidar a ese instituto como un centro de formación de excelencia internacional.
En su informe, Eduardo Monjaraz Guzmán destacó la fortaleza de la planta académica del Instituto de Fisiología, conformada por 18 docentes, de los cuales 82 por ciento son miembros del Sistema Nacional de Investigadores. De ese total, 22 por ciento son nivel III, 14 por ciento nivel II y 64 por ciento nivel I. Asimismo, 94 por ciento tiene perfil deseable y pertenece al Padrón de Investigadores de la Vicerrectoría de Investigación y Estudios de Posgrado.
Dio a conocer que hay tres cuerpos académicos: Neurociencias, Farmacobiología y Neuroendocrinología; de agosto de 2015 a la fecha, se han publicado más de 25 artículos en revistas indizadas y dos artículos de divulgación; y existen seis solicitudes de registro de patente ante el Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial (IMPI).
Por otra parte, informó sobre el financiamiento externo de Conacyt, a través de seis proyectos vigentes de investigación básica, dos de ellos a punto de concluir, dos es su segundo año de ejecución y dos en su primer año.
La misión de esta unidad académica, dijo, es la formación de recursos humanos capaces de resolver problemas locales y contribuir a la consolidación del conocimiento. Para ello, se imparten dos posgrados: la Maestría y el Doctorado en Ciencias Fisiológicas, ambos en el Programa Nacional de Posgrados de Calidad (PNPC) del Conacyt, con una matrícula de 45 estudiantes y una tasa de eficiencia terminal de 85 por ciento, en los últimos tres años.
Una de las metas, indicó Eduardo Monjaraz, es buscar la internacionalización de los programas de estudio, puesto que al año se reciben más de 100 solicitudes de universidades locales y del resto del país.
Otra de las funciones del Instituto de Fisiología es la colaboración en la formación de estudiantes de la Licenciatura en Biomedicina, en coordinación con la Facultad de Medicina. En esta carrera se tiene una eficiencia terminal del 90 por ciento.