Una de las procesiones de Viernes Santo que más acapara la atención es la registrada en Atlixco con la presencia de los Engrillados, personas que encadenadas recorren las calles de referido municipio, las cuales portan coronas de espinas, así como púas o puntas que se colocan en distintas partes del cuerpo, principalmente en hombros y pies.
En cada edición que se realiza, los participantes tienen al menos un año de preparación física, mental y espiritual, quienes reciben orientación en la iglesia de la tercera orden de San Francisco en Atlixco.
Los Engrillados principalmente participan en la procesión de Viernes Santo por el cumplimiento de alguna promesa, por agradecer a Dios un favor recibido, e incluso muchos hombres ofrecen su recorrido por haber permitido que ellos u otro familiar haya conseguido cruzar la frontera en Estados Unidos.
Las cadenas que portan pueden alcanzar de 50 a 100 kilos, cuyos objetos lo acompañan de vestimenta negra, ya sea taparrabos, pantalón y capucha de verdugos, en las cuales también colocan coronas de espinas y puntas clavadas en los pies, espalda, etc.
Las personas que acuden a la procesión acompañan a los engrillados en su recorrido y los ayudan a la recolocación de sus cadenas por su cuerpo para nivelar el peso, así como la aplicación de jugo de limón en las heridas que les provocan las puntas o espinas que se colocan para que no se les infecten.
Para esta edición 2016, se espera la presencia de poco más de 10 mil personas debido a la trascendencia que tiene tanto a nivel nacional como internacional.