A finales de octubre de 2015, la PGR, Marina y Policía Federal llevaron a cabo cateos en la ciudad de Puebla, particularmente en domicilios vinculados al empresario Manuel Rodolfo Trillo Hernández y su hermano Miguel Ángel Trillo Hernández, quien en el 2001 ofreció resguardo a Joaquín Guzmán Loera en el Estado de México, Puebla y el DF, tras la primera fuga del reo.

Los agentes federales mexicanos realizaron cateos en domicilios poblanos de las colonias José María Morelos y Pavón, así como Prados Agua Azul.

Manuel Rodolfo Trillo Hernández fue señalado como la persona que financió la construcción del túnel por donde escapara el narcotraficante Joaquín Guzmán Loera “El Chapo” de la prisión del Altiplano, por lo cual recibió el auto de formal prisión.

De acuerdo con la Procuraduría General de la República, el presunto empresario, fue encarcelado en la misma prisión de donde escapara su ex patrón, el Penal Federal del Altiplano, acusado también de de lavar dinero para el Cártel de Sinaloa.

El encargado de girar la orden de aprehensión en contra de Trillo Hernández, fue el Juzgado Noveno de Distrito de Procesos Penales Federales en el DF, por el delito de operaciones con recursos de procedencia ilícita o lavado de dinero.

Para el 25 de octubre, se realizó un operativo conjunto entre elementos de la Procuraduría General de la República (PGR),Policía Federal (PF) y de la Secretaría de Marina Armada de México, para catear 3 viviendas en diferentes colonias de la capital poblana.

Y aunque no hubo un pronunciamiento claro sobre dichos cateos, extroficialmente se sugirió que estaban relacionados con Trillo Hernández, quien además fungiera años atrás, como piloto del capo sinaloense. (Con información de UN1ON Puebla y El Economista).

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