El gobernador de Puebla, Rafael Moreno Valle, condenó los hechos ocurridos en Ajalpan la noche del lunes 19 de octubre, “donde se perdió la paz, el orden, la seguridad en los bienes y la vida de dos personas frente a las propias autoridades municipales, que se vieron rebasadas por la población”.

En una conferencia de prensa en la que confirmó que asume el mando de la fuerza pública en este municipio de la Sierra Negra, al sur del estado, Moreno Valle señaló que las autordiades locales incumplieron con sus obligaciones en materia de seguridad, marcadas en  el artículo 115 constitucional y la Ley Orgánica Municipal.

“Y establece que el presidente municipal tiene como obligación ejercer el mando inmediato de los cuerpos de seguridad en el municipio, así como asegurar el disfrute de los bienes, posesiones y derechos de las personas que se encuentren dentro del mismo. Es claro que las autoridades municipales de Ajalpan no cumplieron con estas obligaciones”.

Por ello, y en un acto sin precedentes en el estado, el mandatario emitió este miércoles un decreto “por el cual asumo el mando de la seguridad pública en el municipio”, facultad que comprenderá todo el territorio de Ajalpan y se ejerecerá a través del director de la Policía Estatal Preventiva, Anuar Fernández Redondo, quien fue nombrado delegado para tales efectos.

El gobernador señaló que la medida es transitoria y tendrá una duración máxima de 180 días. También confirmó que en un operativo coordinado, elementos de las policías estatal y federal tomaron ya el control de la Comandancia de la Policía Municipal en Ajalpan.

Moreno Valle reiteró que los hechos registrados este lunes “no tienen cabida en Puebla ni en ningún otro lugar de nuestro país. Una turba enajenada por el odio y la confusión, haciendo uso de violencia extrema, terminó con la vida de Rey David y José Abraham Copado Molina”.

A nombre de su familia, el gobernador reiteró sus más sentidas condolencias a los seres queridos de los dos encuestadores. Informó que sostuvo una conversación con Elsa García, esposa de Rey David, y José Angel, hermano de los fallecidos, para expresales su solidaridad y apoyo.

“Me comprometo con los poblanos, como lo hice con los familares de las víctimas, que se actuará con toda la fueza del Estado para que este crimen no quede impune”, finalizó Moreno Valle.